Una nueva etapa ha comenzado en el Sevilla FC. El club ha tirado de la sabiduría y el sevillismo de Joaquín Caparrós para tratar de enderezar una nave que comenzó a desviarse el día que se tomó la decisión de sustituir a Eduardo Berizzo. Es cierto que Montella dio otro aire, al menos en eliminatorias, llegando a la final de copa y a los cuartos de final de la champions. Pero no es menos cierto que a su llegada, se encontró un equipo metido en la quinta plaza de la clasificación y clasificado tanto en copa como en champions, por lo que, si analizamos a posteriori, el técnico italiano ha dejado peor al equipo de lo que se presumía en el mes de enero.

Caparrós cuenta con todo el mundo de entrada. Ha mirado a los ojos a los futbolistas y confía en levantar la situación. Pero el margen es mínimo. Quedan cuatro finales y hay que sacar todas adelante. Y no es nada fácil el calendario. Este viernes hay una final frente a la Real Sociedad, rival directo para entrar en Europa. Después vendrán dos partidos trampa. Los rivales no se jugarán nada, pero esos rivales son el Real Madrid y el Betis, equipos que no pondrán ninguna facilidad al Sevilla FC, sobre todo los vecinos, que se han fijado como objetivo dejar a Nervión sin participación europea.

Cambio de sistema

La primera medida que tomará Joaquín Caparrós es implantar un 4-4-2 clásico, con defensas que jueguen de defensas, centrocampistas que jueguen en el centro del campo y arriba dos delanteros.

Parece una tontería, pero la realidad es que hasta ahora se han visto cosas muy extrañas en este Sevilla FC. Por ejemplo, Jesús Navas ha jugado de lateral derecho gran parte de la temporada, algo que con Caparrós se acabó. Sandro Ramírez no tenía opciones con Montella debido a que cuando salía se situaba en la banda izquierda, pero con Caparrós, el canario será delantero centro.

Tres grandes señalados

Los tres jugadores que se caerán de la alineación quizás sean los tres máximos exponentes del estilo anterior. Franco el Mudo Vázquez, Joaquín el Tuco Correa y Luis Muriel. Caparrós quiere gente que trabaje y se deje la piel en el campo. Pretende devolver el ADN que siempre ha caracterizado al Sevilla FC.

El trabajo y la entrega como principales armas.

El once

Con la duda de David Soria o Sergio Rico bajo los palos, el Sevilla FC formará con una línea de cuatro defensas con Layún y Escudero en los laterales y Mercado y Lenglet como pareja de centrales. Un doble pivote con Banega y un perdonado Nzonzi (ha pedido perdón a sus compañeros y está comprometido a ser el jugador que necesita el Sevilla FC). Jesús Navas volverá a su posición en la banda derecha, con Pablo Sarabia por el carril zurdo. Arriba, dos delanteros por primera vez en mucho tiempo, con Wissam Ben Yedder y Sandro Ramírez.