Las animadores siempre son el alma de las olimpiadas y generan mucha emoción en la mayoría de los asistentes a ellas, crean un ambiente de euforia y son capaces de subirle el ánimo a cualquiera, pero esto no lo obtienen tan fácilmente. Para poder obtener el nombre de “animadora”, su entrenamiento y esfuerzo es digno de admirar; significan horas de entrenamiento y preparación para cualquier presentación y sobre todo, mucha amistad entre todas las integrantes del grupo para lograr su cometido.

Al ver a estas chicas en acción, entiendes por qué les dicen “animadoras”, y es que de verdad desbordan juntas tanta energía y alegría que acabas por contagiarte y te dan ganas de aprenderte la rutina y hacerla con ella, posiblemente.

Además, te das cuenta de inmediato de lo bien que se llevan entre ellas y como se ayudan.

Para lograr llegar al final y tener posibilidades de ganar, la coordinación y fuerza de las participantes es muy importante, ya que los jueces lo tomaran en cuenta para la calificación. Aquí es donde la labor de equipo es fundamental, ya que para que la rutina de baile y las figuras se vean parejas, cada quien tiene que estar en su lugar en el momento preciso y sin ningún error. Bastaría con que una no llegara a tiempo o que se colocara un paso atrás para que la formación se viera extraña, y obviamente esto podría bajarles puntos a todo el grupo. También es importante que se fijen en como lo está haciendo la compañera de al lado, así podrán decirlo, por poner un ejemplo, si está colocando los brazos por debajo del nivel que deben ir o si va atrasada.

Ser animadora es una tarea difícil

Para ser animadora se necesita disciplina, pues no se trata nada más de ensayar unos pasos de baile. Armar y perfeccionar una rutina requiere de más de cuatro horas diarias de entrenamiento exhaustivo, que muchas veces acorta una tarde de estudio a la mitad. Por esto cuando los exámenes llegan, las chicas que son animadoras tienen que prepararse con varios días de anticipación, de lo contrario, tendría que faltar a un día de entrenamiento, lo que equivale a perderse de los nuevos pasos.

La fuerza de voluntad también es relevante cuando tienes que repetir un millón de veces estos pasos complicados que te cuestan trabajo y que hay que perfeccionar a como dé lugar, ya que el grado de dificultad de la rutina es algo que se toma en cuenta a la hora de calificar.

Factores importantes de las animadoras

Otros factores importantes son el entusiasmo y la intensidad con que las animadoras realizan la rutina.

En la mayoría de las rutinas se incluyen "gritos de animo " que las chicas gritan con todos sus pulmones para contagiar al público, así que si por algo te regaño el entrenador, aprovecha esta parte de la coreografía para gritarla con todas tus fuerzas, a través de estos gritos para animar a los asistentes.

Si por otro lado el entrenador te cae súper bien, también puedes aprovechar la rutina para sonreírle todo el tiempo, pues la expresión alegre de las animadoras, sin señales de cansancio, es una actitud que seguro las hará ganar puntos.