Pep Guardiola, ex-jugador y ex-entrenador de la más que probable mejor etapa de la historia del club azulgrana quiere hacerse con los servicios de un jugador de la plantilla del Fútbol Club Barcelona. Las recientes incorporaciones del manchester city han colocado al equipo dirigido por el entrenador catalán, como líder indiscutible de la Premier League y como claro candidato al título liguero debido a la abismal diferencia de puntos respecto sus perseguidores.
Pero su hambre por ganar títulos en esta liga no termina, y su hambre por mejorar la plantilla y hacerla mejor día a día tampoco, de ahí la idea de reforzar su equipo con una figura en medio del campo que sea capaz de organizar la medular y actuar como nexo de unión entre la defensa y la línea mediocampista.
Los fichajes del Manchester City
El Manchester City se ha caracterizado en estos últimos años por fichar jugadores a precio astronómico, si bien Jose Mourinho destacaba hace poco en una rueda de prensa que Pep Guardiola fichaba laterales a precio de delantero centro, no era casualidad, ya que el desembolso económico que ha sufrido el equipo para hacerse con los servicios de ciertos jugadores han dado la vuelta al mundo por sus excesivos precios. Aun así, le ha servido al conjunto del City para realizar un buen juego y poder estar en lo más alto de la clasificación de la liga a gran distancia respecto sus perseguidores.
El objetivo de Pep Guardiola
Guardiola quiere reforzar la plantilla de cara la temporada siguiente y se ha fijado en un jugador del Fútbol Club Barcelona declarado totalmente intransferible des de hace muchos años.
Según fuentes del portal digital Don Balón, el equipo de Manchester estaría dispuesto a negociar su traspaso al club por valor de 200 millones de euros y un sueldo de 30 millones al año para el jugador, estamos hablando del centrocampista que lo sacó del Barça B y lo puso al primer equipo desde los inicios de temporada, Sergio Busquets.
El entrenador catalán Pep Guardiola, considera al centrocampista como una figura clave para su equipo de cara a la siguiente temporada y ofrecería al equipo robo de balón, dinamismo en el centro del campo y rapidez y fluidez a la hora de sacar el balón controlado desde las posiciones de la defensa. Pero el Fútbol Club Barcelona no le ha puesto precio, ya que lo considera fijo e intransferible en la plantilla y no está dispuesto a desprenderse del mismo.