Conocemos desde hace mucho tiempo varios accidentes aéreos, en su mayoría, con el conocimiento de sus causas, pero lo ocurrido en el avión donde viajaban los jugadores del Oklahoma City Thunder de la NBA es una incógnita.

Tras jugar el partido y perder frente a Minnesota 119-116, la plantilla junto al resto del equipo técnico decidieron embarcar en al avión para poner rumbo hasta Chicago y enfrentarse a los Chicago Bulls dentro de la gira por los Grandes Lagos.

Un fenómeno misterioso

Durante el tiempo de vuelo sufrieron un aparatoso accidente chocando con un objeto no identificado a más de 9.000 metros altura.

Este desafortunado choque dejó el morro del avión completamente abollado, pero lo que ha causado el accidente no lo han podido ni identificar la propia tripulación del avión.

Tras el increíble choque, aterrizaron aparentemente con normalidad en el aeropuerto de la Ciudad del Viento con el morro totalmente destrozado, como se puede ver en las imágenes aportadas en las redes sociales por parte de los jugadores del equipo. Por suerte, ninguno ha resultado herido, pero los jugadores y todo el equipo técnico reclaman una explicación a la NASA ante lo ocurrido, ya que ha generado una gran conmoción al ser algo de lo que no se encuentra una explicación lógica.

Una anécdota más

Algunos jugadores con tonos humorísticos han querido compartir este momento tan impactante e increíble escribiendo en sus cuentas oficiales de Twitter mensajes como: "¿Qué animal/cosa vuela a la misma altura que un avión y puede causar esto?", escribe Álex Abrines o "Tío si no sabes tirar a canasta y tiras piedras no apuntes al avión...", bromeó el jugador Juancho Hernangómez.

Por otra parte, otro de los jugadores del equipo, Steve Adams aprovechó la ocasión para enviar un mensaje a la NASA reflejando lo sucedido y exigiendo una respuesta coherente a lo ocurrido.

Incluso, Carmelo Anthony con fotos del avión afectado, se preguntaba cual era el motivo de lo ocurrido, qué podría haber chocado con una aeronave grande y en medio de la noche con un cielo oscuro a miles de metros de altura sobre la tierra y en el que apenas hay visibilidad.

A pesar del gran susto y del pánico vivido, tanto para los jugadores como para el equipo técnico, este aparatoso accidente quedará grabado en sus memorias por mucho tiempo como una anécdota distinta que les hará olvidarse de su derrota del partido anterior, pero no de lo ocurrido.