A una semana del polémico referéndum establecido por Carles Puigdemont en Cataluña, la controversia no se termina en España y en el ámbito deportivo no es para menos. Han sido días llenos de tensión e incertidumbre para Gerard Piqué, el futbolista de origen catalán que se pronunció a favor de la independencia.

Pifias del público, emotivas ruedas de prensa, desencuentros con otros deportistas y el inesperado apoyo de algunos, tanto en su propio equipo como en su rival más directo, el Real Madrid. Geri aún tiene cuentas pendientes con la cancha.

Piqué estuvo a punto de entregar su dimisión ante la liga

El pasado domingo, Piqué se puso en evidencia durante la rueda de prensa en la que habló sobre la separación de Cataluña, ante una audiciencia mayoritariamente negativa. Ni siquiera sus lágrimas pudieron conmover a los más acérrimos defensores de la unión de España, lo que provocó múltiples burlas y presiones contra el central.

La situación había llevado a especular una posible dimisión de su parte, antes del 2018, poniendo en duda sus planes de llegar al Mundial de Rusia y permanecer con el Barça.

No obstante, quienes saben de esto estaban conscientes de que no era tan fácil respaldar esa renuncia.

Por ahora, se sabe que Jordi Alba y Sergio Busquets han jugado un papel importante a la hora de hacer recapacitar al futbolista catalán, que se asegura, ya tenía la carta preparada para despedirse de la selección, y estaba dispuesto a dejar al Barça por las buenas.

No era para menos, después de todas las advertencias que le hicieron sobre sus mensajes en Twitter y el desagrado que le han tomado los aficionados.

Hasta el momento, se sabe que Piqué permanecerá con su equipo hasta finales de año, aunque no se ha dicho nada sobre removerlo de la banca para los partidos restantes en tierra española.

Es probable que permanezca para el Mundial de 2018

Durante la última rueda de prensa, vimos a un Piqué más respuesto y con toda la disposición de volver a encaminar su carrera. Su permanencia en la Federación Española por lo pronto, indica que seguirá en las filas para el la copa mundial del año próximo; un sueño que personalmente le hacía ilusión y por el que estaba dispuesto a esforzarse, a pesar de la polémica en Cataluña.

Desde luego, podría ser este el proyecto que lo mantenga vigente en el campo, pues la afición coincide en que al catalán ya no se le ven muchas ganas de jugársela por España.