El utrerano no está teniendo el protagonismo que esperaba en estos primeros partidos de la temporada. Llegó al Santiago Bernabéu siendo una de las jóvenes sensaciones del fútbol español, y con el cartel de un jugador pretendido en el mercado de fichajes.
Sin embargo, el sueño de Ceballos siempre fue jugar en el Real Madrid y, al conocer que los blancos realizaron una propuesta seria por él, no tuvo dudas. Después de dos meses vistiendo la elástica merengue, su rol aún no termina de ser principal y sabe que solo el tiempo le pondrá en su lugar.
Zinedine Zidane tiene claro cómo debe cuidar a sus pupilos.
Si bien fue dándole progresivamente minutos a Marco Asensio, con el ex del Betis hará exactamente lo mismo. El galo atesora una de las plantillas más completas de la historia del club, y es consciente que será difícil tener contentos a todos.
Ceballos tiene 21 años recién cumplidos, y junto a Asensio, Llorente, Vallejo y Mayoral está llamado a marcar una nueva generación histórica en la capital de España. Solo con el paso de los partidos y firmando grandes actuaciones cada fin de semana, podrá ganarse la confianza del técnico francés, que ya confirmó en rueda de prensa que ha renovado con el club.
Debut en Champions League
El centrocampista poco a poco va acumulando minutos en su casillero. Las lesiones que están teniendo lugar en el vestuario blanco brindan una oportunidad única al sevillano para demostrar su calidad.
Zidane sabe que su presencia en los esquemas del equipo será fundamental para conseguir los objetivos marcados en la entidad merengue y, de hecho, ya ha empezado a darle minutos.
El pasado miércoles hizo realidad uno de sus sueños. Debutar en Champions League. Fue ante el Apoel de Nicosia en la victoria del Real Madrid por tres goles a cero.
Sustituyó a Isco a veinte minutos del final, y ya empezó a dejar detalles de los que gustan al Bernabéu.
Estreno en la Liga
También se vistió de corto ante la Real Sociedad en la victoria de los suyos por un gol a tres. Fue su estreno en la competición doméstica con el Madrid y la premisa de lo que se espera de él. Tan solo pudo jugar cinco minutos, pero lo importante es que ya empieza a salir al césped reiteradamente.
Esos 16,5 millones de euros invertidos por él, uno y medio más de lo que marcaba su cláusula, serán recompensados a lo largo de los próximos años por un jugador que está llamado a dejar su huella en la historia del club blanco.