El pasado miércoles el Real Madrid encajó su segunda derrota consecutiva, esta vez con el Celta de Vigo en el Santiago Bernabéu, bajo los ojos incrédulos de sus aficionados.

El Real Madrid no jugó bien y no mereció ganar pese a la artilleria pesada que estaba en el campo. Esta vez no faltaron a la cita ni Modric ni Cristiano Ronaldo, pero a nada sirvió, ya que ambos no exprimieron al máximo sus posibilidades. A las que nos han acostumbrados.

Un Celta muy compacto en defensa y rapido en el contragolpe, destrozó los animos de los blancos. Justo cuando empezaba a atacar y presionar más el Madrid llegó el gol de Aspas al minuto 64.

Una combinación perfecta a la que el Madrid no estaba preparado. Marcelo intentó salvar a los blancos del barro y marcó el gol del empate cinco minutos después. No valió para nada ya que a los 30 segundos había otro contragolpe del Celta, que Jonny remató a gol.

Esta vez no hubo ningún gol al 93. Sergio Ramos no salvó al equipo y se fue cabizbajo junto a sus compañeros en el vestuario. Frente a los micrófonos Casemiro y Zidane transmitieron tranquilidad, aunque mucha amargura por el resultado.

Sin embargo, los aficionados ven llegar el fantasma del 2015 cuando, después del Mundialito y lograr el récord de victorias seguidas con Ancelotti en el banquillo, tuvieron una mala racha que le hizo abdicar la Liga, Copa y Champions.

Este año el récord era diferente, estuvieron 40 partidos sin perder. El pasado domingo, el Sevilla les recordó lo que significa ser humanos e infligió la primera derrota de 2017 rompiendo la racha récord

En este sentido, no ayudaron las lesiones que están sufriendo los jugadores blancos. Isco, James, Bale, Pepe... y ahora también Carvajal.

El defensa sufre una rotura muscular y estará de baja durante un mes. Su sostituto natural sería Danilo, aunque no se puede decir que sea una certeza para el equipo. Sus fallos defensivos han costado caro al Madrid en pasado y en situación de emergencia podrían ser fatales.

El mes que viene va a ser crucial para el Real Madrid.

En Liga, tiene solo dos punto de ventaja sobre el Barcelona y uno sobre el Sevilla. En Copa del Rey, tiene que remontar la derrota de la ida contra el Celta, pero le toca hacerlo en Balaídos. Por último, a mediado de febrero vuelve a la Champions con los octavos de final contra el Nápoles.