En una lejana estación de trenes japonesa, se desarrolla todos lo días una escena digna de la más romántica literatura de Japón. La figura de una adolescente con su abrigo negro se recorta en el nevado escenario de la vieja estación de Kamishiritaki , donde el tren se detiene para que subauna única pasajera, la chicaque viaja hacia su escuela secundaria.

Esto no ha pasado desapercibido para los toritetsu, especie de plaga japonesa con cámaras, que se dedica a fotografiar todo tipo de sucesos en los que tenga intervención algún ferrocarril. Buscan fotografiar trenes antiguos o modernos, en medio de una nevada, atravesando campos en flor, en la ciudad, llegando a una estación urbana, no importa donde ni como, trenes, trenes y más trenes.Constituyen una verdadera molestia para los pasajeros y los empleados de ferrocarril.

Acuden por decenas a los andenes de las estaciones japonesas, produciendo inconvenientes y un que otro accidente. Los empleados del ferrocarril deben poner vallas y con megáfonos tratar de organizar y disciplinar a estamuchedumbre con cámaras.

En las fotografías que documentan este suceso fuera de lo común, se ve la imagen de la adolescente que parece estar en el medio de la nada, en un frio día de invierno, pero detrás de este pintoresco escenario se esconde una nube de toritetsu que cámara en mano y flashes por doquier disparan sobre la chica del tren. Esta verdadera e insoportable molestia ha hecho que la estudiante piense en optar por algún otro medio de transporte para llegar a su escuela.Puesto que los "paparazis" no se conforman con documentar el momento , sino que le piden que pose para ellos.

Todo comenzó a fines del año pasado cuando algunos usuarios de Twitter, dieron cuenta del hecho por la red. Desde entonces la chica del tren surgió a la fama, al menos para los fanáticos de los trenes.

La compañía de trenes ha decidido que mantendrá el serviciohasta que la estudiante japonesa , termine sus estudios secundarios; lo que sucederá en marzo del corriente año cuandorinda sus exámenes finales. Mientras tanto la verdadera y muy molestabanda de los toritetsu seguirán asistiendo a la estación para tomarle fotografías.