Desde que el rostro y el nombre de Juana Rivas comenzara a difundirse por los medios de comunicación, también se ha mantenido una versión paralela de los hechos. Esa versión llegaba de boca del padre de los niños y ex pareja de Rivas, Francesco Arcuri.

Juana aseguraba ante la prensa que el hijo mayor de ambos, no quiere ver a su padre, sin embargo Arcuri dice tener las conversaciones grabadas con el pequeño de 11 años para comprobar que tiene una "relación excelente". Por su parte, la madre sostiene que el mayor ha comenzado a contar que el progenitor les pegaba, tanto a él como al más pequeño de los hijos que apenas tiene 3 años.

Arcuri, por su parte, sostiene que nunca maltrató ni física ni psicologicamente a nadie, ni siquiera a Juana. Las versiones cruzadas hacen que las resoluciones finales queden en manos de la justicia,

En el año 2009 existió una condena hacia Francesco Arcuri por malos tratos. La pareja se separó y a las 4 años, retomaron la relación. Desde el 2013 viven en una isla donde regentean un hotel entre ambos.

La justicia española considera que no existe riego de peligro para los menores, por eso ha ordenado la entrega de los niños al padre. Arcuri propone una custodia compartida que Rivas ha rechazado.