Los accidentes en ascensores son altamente improbables. Lo que ha sucedido en la madrileña calle de Hermanos Bécquer no tiene precedentes. De hecho, en la última estadística que se tiene de incidentes en ellos, la del 2014, no registra ninguna víctima mortal.
La mayoría de las veces, las personas heridas o muertas en elevadores son empleados de mantenimiento de los mismos que ocurre un accidente mientras están trabajando en el.
En lo referente a pasajeros, los incidentes más comunes son el caer al vacío porque la puerta se abre o es abierta por el usuario, sin que el ascensor esté en el piso.
O los intentos por abrir las puertas, si el aparato se ha quedado detenido entre dos plantas.
Los expertos recomiendan, por ningún motivo tratar de abrirla las puertas, en caso de quedarse encerrado en un ascensor. La prioridad, avisar por el telefonillo que todo elevador debe tener de la urgencia y hacer sonar la alarma para alertar a los vecinos.
El temor generalizado de quedarse sin aire dentro de un ascensor detenido, tiene más d enfundado que de cierto. Estas máquinas cuentan con rejillas que ventilan y salvo contadas excepciones, no podría ocurrir algo semejante.
Si el elevador llegara a caer al vacío, la recomendación es tumbarse en el suelo, aunque es una maniobra difícil de realizar.
