Para muchos, las fotos y vídeos subidos por Paz Padilla a su Instagram mostrando más de cincuenta regalos primorosamente envueltos por ella misma en lo que ha llamado “taller de los reyes magos”, ha sido una muestra de ostentación poco oportuna con la que le está cayendo desde hace años a muchísimas familias españolas que tienen que recurrir a Caritas y a asociaciones humanitarias diversas para poder subsistir y hacer algún regalo por Reyes a sus hijos. Lo mismo que Paz hizo cuando era niña debido a la precaria situación por la que atravesaba su familia, según ella misma ha confesado.

El hecho de que su empleada de hogar sea una mujer africana parece que tampoco ayuda. Ya la foto navideña del 2016 con su hija, ambas desayunando mientras la empleada sirve el té a la cómica, fue muy criticada y aunque ella siempre pregona que es una más en su casa, el hecho de que en la foto se la viese trabajando hizo que los comentarios de repulsa fuesen la mayoría.

Curiosamente el único vídeo que muestra Paz de la recepción de un regalo este año es el de esta mujer llorando emocionada al recibir un teléfono móvil que conociendo la generosidad de que hace gala la gaditana suponemos será de última generación.

¿Excesiva ostentación?

Eso es lo que opinan algunos en las fotos y vídeos que ella ha colgado mostrando su abeto navideño rodeado de infinidad de paquetes de todos los tamaños, pero con muy pocos nombres diferentes en ellos o lo que es lo mismo, muchísimos regalos para, por ejemplo, su hija.

Otros en cambio la alaban e incluso hay quien dice que le copiará la idea de los envoltorios para el próximo año.

Ya se sabe que nunca llueve a gusto de todos y entre los comentarios de reproche, le recuerdan a Paz que precisamente por ser personaje público y por lo que ha contado de su infancia, debería vigilar más lo que sube a su Instagram y más cuando ya ha sido criticada en otras ocasiones por lo que muchos consideran una ostentación innecesaria.

Hay quien la ha rebautizado como “Paz Pardilla” por exponerse así a la crítica.

¿No será que los paquetes están vacíos y que todo es una broma de la humorista que aprovecha para reírse de quienes la critican? Sabiendo de su afición a las bromas más o menos pesadas que acostumbra a gastar a sus compañeros, la verdad es que no nos extrañaría si así fuese, aunque la sensación viendo las fotos no es esa, desde luego.

Su compañera María Patiño ha aprovechado para salir en su defensa en su programa de #Television “Socialité”: "No hay nada de malo en que alguien que tiene quiera compartirlo".

Lo cierto es que Paz Padilla se ha convertido en empresaria de éxito aparte de su trabajo como actriz y presentadora sustituta en “Sálvame”. Este pasado año ha sido uno de los mejores a nivel económico para la gaditana que ve como sus ingresos no hacen más que aumentar y al mismo tiempo puede presumir de una relación sentimental que aunque en la distancia, a ella y a su marido parece que les funciona a las mil maravillas.

La “niña de sus ojos” estudia en Londres y es además una de las jóvenes influencers de moda de este país, por eso Paz reparte sus fines de semana entre Cádiz para estar con su marido y suponemos que con su familia y Londres para poder disfrutar de su hija con la que comparte no pocas aficiones.

Falta ver si habrá reacción por su parte o por parte de sus compañeros en "Sálvame", que andan de capa caída tras su fracaso la pasada Nochevieja.