Sigue la serie de programas dedicados al misterio, que dirige y presenta Javier Sierra. Después de un inicio donde se fueron tocando diversos casos, los dos últimos programas, emitidos en #0 de Movistar, ha sido monográficos. El que traemos a palestra viaja hasta Fátima (Portugal), para indagar en una de las apariciones más mencionadas del s. XX.

Muchos pensaban que, en el 2000, tras la revelación del tercer secreto de Fátima, el caso ya no podría ofrecer novedades de relevancia. Tal revelación se produjo durante la Misa del 13 de mayo. Muchos pudimos escucharla in situ.

Posteriormente, la web oficial del Vaticano pondría al alcance de todos, los documentos generados durante el viaje del Papa Juan Pablo II: sus predicaciones, mensajes... y el texto íntegro del secreto.

Por entonces, vivía Lucía, la última vidente viva de aquellos tres que fueron en origen. Ella estuvo atenta, escuchando, al igual que los demás, cómo por fin el secreto veía la luz. Hoy, casi 18 años después, Javier Sierra regresa al lugar de los hechos y nos presenta a un curioso sacerdote, el padre Formigao.

Este religioso fue uno de los primeros investigadores de las apariciones y, todavía en vida, publicó hasta 6 libros con el resultado de sus pesquisas. Llegó a Cova da Iria con todo el escepticismo posible de su condición y llegó a convertirse en uno de sus más fervientes publicadores. ¿Qué le hizo cambiar?

El padre Formigao, un cura escéptico

El tratamiento de las apariciones se ha hecho de una manera novedosa.

Saliendo de la reconstrucción desde la mirada de los tres pastorcitos, el equipo de 'Otros mundos' se centró en las investigaciones de este sacerdote. Llegó a casa de aquellas familias convencido de la inexistencia de las apariciones. Hoy es un centro de peregrinaciones, pero entonces era un lugar perdido del interior de Portugal.

Su posición fue, como decía, de alejamiento, llegando a espiar desde lejos a los reunidos para alguna de las apariciones. Luego, se centró en los testimonios de los niños. Y su postura no cambió hasta que fue testigo, junto a miles de personas, de lo que hoy se llama "milagro del Sol". Básicamente, en medio de una lluvia persistente, de repente, esta cesó, el Sol se movió por el cielo (se denóminó "el baile del Sol") y los asistentes sintieron calor y vieron como sus ropas se secaban al instante.

La Iglesia, todavía hoy, defiende la libertad individual de creer o no en las apariciones.

Imágenes para la sorpresa

Javier Sierra contacta con un sacerdote, una monja y un profesor universitario. De sus investigaciones va sacando datos y documentos que configuran imágenes hoy casi desconocidas. Por ejemplo, acostumbrados a la imagen de la Virgen blanca, Nuestra Señora de Fátima, pocos saben que la imagen transmitida por los videntes era de la una niña de unos 15 años, envuelta en luz, bellísima como ninguna otra, con un vestido hasta media pierna, sin rosario en las manos. El misterio sigue vivo en Portugal.