El gran cantautor malagueño nos regaló uno de los momentos más mágicos de los que se tienen constancia hasta la fecha en Operación Triunfo a través de su canción 'El patio'. Delicado, desgarrador, melancólico, histriónico,... una gran variedad de tonalidades dentro de una paleta envidiable y que muchos artistas desearían poseer. Y además, dentro de esta gran variedad de personajes, hemos podido ver la de un Pablo crítico. Crítico con el jurado del programa, así como con aquel jurado que lo valoró tras su paso en aquella lejana sexta edición de Operación Triunfo.

Chascarrillo al jurado de OT

"No os olvidéis nunca de la libertad. Hay que ser libres, y sobre todo en la música" - mirando al jurado desafiante y golpeando el piano. Estas han sido las palabras de Pablo López tras su actuación.

Este mensaje, como bien es sabido por muchos de sus seguidores, hace alusión a los rifirrafes que el cantante tuvo con el miembro del jurado, Risto Mejide, en su paso por el programa de Operación Triunfo. Y es que estas fueron algunas de la calificaciones que Risto le dirigió por aquel entonces: "cantante de hotel", "pianista de crucero" y "chepablo", haciendo este último adjetivo alusión a la postura que adoptaba a la hora de tocar el piano. Resumidamente, Mejide le pronosticó una carrera nefasta.

Actualmente, como podemos apreciar, nada de esto se cumplió, siendo Pablo López uno de los artistas más laureados del panorama musical de hoy en día.

Así pues, del mensaje del malagueño hacia los 'triunfitos' podemos extraer la siguiente traducción: "no permitáis que nadie os diga qué podéis o qué no podéis hacer. Vosotros sois los que debéis de marcar vuestros propios límites".

Alfred, Cepeda,... algunos de los objetivos de Mónica Naranjo

Esta noche, el desencadenante de todo fue este comentario de Mónica Naranjo hacia Alfred: "La actuación de esta noche, si la Academia te hubiera dado libertad para hacer tu versión, hubiera sido un 'numerazo'. Te sacan de ahí y te pierdo". Este comentario ha despertado la confusión en todos, ya que carece de sentido si tenemos en cuenta que en galas anteriores, la miembro del jurado ya tachó al joven concursante de irreverente ante los consejos que recibía por parte de los profesores de la academia.

Asimismo, el gallego Luis Cepeda ya sufrió del desprecio de Mónica, quien le regaló un gesto de desconsideración tras la expulsión de Raoul, con quien compartió nominación algunas galas antes de su definitiva expulsión.

Como podemos ver, los característicos concursantes Alfred y Cepeda son claros análogos de aquel mártir llamado Pablo López, quien con un marcado estilo propio, tuvo que aguantar las impasibles embestidas de un jurado que no supo apreciar el potencial que encerraba dentro de sí, y que hoy, ha florecido en el gran artista que es.