El dinero no da la felicidad... ni tampoco la clase o la educación. Eso es al menos lo que se desprende de la última información revelada por nuestros compañeros de Periodista Digital en la que se habla de la enorme cantidad de dinero que dos de los famosos más televisivos adeudan a otro rostro conocido.

Hablamos de Kiko Matamoros y Belén Esteban, quien según recordó recientemente Carmen Lomana, acumulan unas ingentes deudas con ella a raíz de la sentencia judicial que esta le ganó a varios de los colaboradores de Telecinco por las feroces críticas que la millonaria recibió hace ahora más de siete años.

Unas injurias y calumnias que provocaron que el equipo de abogados de Lomana tomara cartas en el asunto y que lograran al poco tiempo, vía judicial, un triunfo que llevaba a estos dos, pero también a otros colaboradores como Mila Ximénez, a tener que aflojar el bolsillo por haber sobrepasado los límites legales en sus vejaciones hacia ella.

Esa demanda interpuesta en 2011 fijó que Mila Ximénez debía abonarle a la rubia 60.000 euros, que Kiko Matamoros debía pagarle 30.000 euros y que Belén Esteban debía ingresarle otros 30.000 euros. En total, 120.000 euros de los que, por ahora, solo habría recibido los 60.000 de Mila Ximénez.

Una cantidad que, a pesar de tratar evitar abonar mediante recursos, habría ido incrementándose vía intereses hasta convertirse en un auténtico pastizal que, salvo milagro o impago que termine en embargo, deberán pagar a una Carmen Lomana que, visto lo visto, se arrepiente ahora de no haber hecho lo propio con Telecinco y con la productora La fábrica de la tele.

Ni Belén Esteban ni Kiko Matamoros pagan sus deudas

Según esta información, de la que aquí nos estamos limitando a hacernos eco, parece claro que ni a Belén Esteban ni a Kiko Matamoros les gusta pagar sus deudas.

Y es que, cabe recordar, se ha publicado en varios medios que estos acumulan unas ingentes cantidades, que descolocarían a cualquier hijo de vecino, en forma de deuda al fisco español.

A la espera de recibir lo que le debe Toño Sanchís de su interminable juicio en el caso de la de San Blas y a la espera de que sus nuevos proyectos empresariales le permitan ir, poco a poco, pagando lo adeudado en el caso de Kiko Matamoros, parece que a ambos se les acumulan los compromisos de pago. Veremos si los intereses no se acaban multiplicando hasta el punto de que un juez solicita un embargo. Todo es posible.