Beatriz Retamal, ganadora de Gran Hermano 17, ha sido una de las grandes triunfadoras de la pasada edición del reality de Telecinco y no únicamente por haberse llevado el maletín con los 300.000 euros del premio. Bea salió de la casa de Guadalix de la Sierra enamorada de Rodri, con el que mantiene una bonita relación sentimental un año después de encontrarse en el concurso.

Además, ambos han protagonizado su propio reality show y están comenzando a hacer sus pinitos en el sector empresarial con varios proyectos. No cabe duda de que la suerte ha estado a favor de la valenciana todo este tiempo y es que, detrás de esa fachada de chica de barrio y de 'choni' se encontraba una persona que, gracias a su simpatía, sencillez y locuras, ha logrado conquistar a miles de seguidores.

El regalo de Bea a Montse

Ahora, Bea ha dado una grandísima y preciosa lección de lealtad, gratitud y amistad. Recordemos que, en su edición, Bea fue expulsada por la audiencia y regresó al reality esa misma noche gracias a la famosa caja con la repesca automática que le cedió Montse, su compañera y amiga dentro del reality. Pues bien, un año después de aquel momento, Bea ha querido devolverle ese gesto de amistad a su compañera y agradecerle esa caja que tantas alegrías y sorpresas le ha dado durante este tiempo.

Así, Bea sorprendía a todos en el día del cumpleaños de Montse, dedicándole unas emocionantes y sentidas palabras de gratitud y dándole una enorme sorpresa; un viaje a Las Vegas y a otros rincones del continente americano.

Así, las dos concursantes, acompañadas por Yolanda, la madre de Bea, han puesto rumbo a Estados Unidos para celebrar juntas el cumpleaños de la ex concursante de GH17. Gracias a las redes sociales de ambas estamos disfrutando de este super viaje a tres con todo lujo de detalles.

La relación de Bea y Adara

Precisamente, Bea daba otro gesto de humildad al reencontrarse con Adara, ex concursante de Gran Hermano 17, y propiciar un acercamiento con la que, hasta el momento, era su máxima enemiga del reality.

Gracias a eso, Adara y Bea confirmaron haber enterrado el hacha de guerra y comenzar su relación desde cero. Con todo ello, la valenciana ha demostrado que no sólo basta con ser una digna ganadora durante el concurso, sino también fuera de éste. Algo de lo que no pueden presumir todos los concursantes del reality ni todos los que, gracias a los espectadores, se convirtieron en ganadores de sus respectivas ediciones. ¡Bravo por Bea!