Nuevo escándalo en el programa de corazón decano de la televisión española que promete poner patas arriba la actualidad del programa de Telecinco. En este caso, a diferencia de lo que viene sucediendo en el programa, no se trata de un cruce de agresiones verbales o de un momento tenso que haya tenido que acabar con mediadores separando a colaboradores o invitados, la cosa es aún más grave.

Se trata de la revelación por parte de uno de los colaboradores del programa del presunto caso de acoso sexual al que fue sometido hace unos años durante sus primeros pasos delante de la pequeña pantalla.

Hablamos de Rafa Mora, uno de los tertulianos de los que se está hablando podría perder su silla en los próximos meses si continúan adelante los cambios previstos en este espacio y que, a la sombra de los sucedido en Estados Unidos con Kevin Spacey o Dustin Hoffman ha decidido sacar a la luz su caso concreto.

Todo sucedía durante una de las muchas pruebas de selección a las que acudió al valenciano en busca de un trabajo en una serie de ficción. Allí, éste se topó con un productor que, según el testimonio aportado por el que fuera tronista de Mujeres y Hombres y Viceversa, cruzó varias líneas rojas hasta adentrarse en el terreno delictivo.

Siempre según el testimonio del levantino, el productor le comentó que tenía "ángel", pero que sin padrino no llegaría a nada.

Esa fue la primera insinuación de muchas más que llegarían en los siguientes minutos de reunión de ambos, a solas, en los que la cosa solo iría a más.

La propuesta indecente del productor a Rafa Mora

En un momento dado, y dejando ojiplático a Mora, éste le pidió que necesitaba verlo mejor y que, por tanto, se quitara la camiseta.

Algo a lo que Rafa accedió sorprendido hasta que el productor le pidió que tenía que acabar de verlo bien y que, por tanto, sería ideal que se quedara en calzoncillos. Medio en 'shock', y pensando que quizás era lo habitual, el ex viceverso también aceptaba.

Tras realizar un comentario sobre su trasero alabándolo, el colaborador de Sálvame, recuerda, notó "que me deseaba", pero trató de dejar pasar aquel episodio marchándose lo antes posible de aquellas instalaciones sin darle mayor "importancia".

Sin embargo, al llegar a su casa familiar y contarle lo sucedido a su hermana, quien se percató de la gravedad de los hechos, ambos decidieron escribir una carta de queja al productor que, para sorpresa, acabaría con una invitación privada a Rafa para pasar unos días en su casa.