Ayer por la tarde y durante unos tensos minutos cayeron las máscaras y todo aquello que desde hace meses se ha comentado en los pasillos de Telecinco y en los mentideros de la prensa rosa, salió a la luz.
Todo vino por el polígrafo, ese que dice verdad o mentira según le convenga a la cadena, que el sábado se le hizo a Carmen Borrego, hermana de Terelu Campos.
Se ha vuelto a comentar lo que siempre se ha dicho, que Teresa Campos y Terelu van de la mano y que la madre se fue de una cadena porque no le daban a la hija el programa de la tarde como presentadora.
Una Terelu afónica entraba por teléfono para negarlo muy enfadada
Kiko Hernández era el que había lanzado la andanada pero ha sido oír decir a su compañera que María Teresa Campos “Está que fuma en pipa” y Kiko reculaba, como siempre hace frente a las Campos. Para que luego digan que el triunvirato está en horas bajas y no tiene poder en Telecinco.
Paz Padilla al límite, explota
Paz se ha puesto al teléfono y Terelu le ha dicho que no quería hablar con ella ya que estaba muy enfadada, a lo que la presentadora decía no entender nada y leía las primeras palabras del mensaje que la colaboradora le había enviado para hacerle ver su enfado: “Manda narices. Muy bonita tu pregunta”. Se refería a la que Paz había hecho sobre si era cierto que Teresa Campos ponía a Terelu como parte de sus contratos.
Ella se justificaba: “Yo tengo que hacer preguntas es mi trabajo, aunque sean incómodas”. Mila Ximénez que vuelve a ser amiguita de Terelu, saltaba como un resorte y le espetaba: “A ti por el tono se sabe cuando alguien no te gusta y Terelu no te cae bien”. La presentadora muy alterada lo negaba: "¡Tengo 48 años y soy una tía súper franca y no me cae mal Terelu!
”.
Mila ya gritando la conminaba: “¿Y yo, te caigo mal?” y ella respondía: “¡Tú, sí!”. El cajón de las esencias se abría por fin y afloraba lo que ya se sabía, pero que Paz siempre había negado.
Hay colaboradores que no le gustan y los tolera porque es su trabajo. Mila gritando contestaba: “¡Pues si yo te caigo me mal, a mí tú me caes peor!”.
También hay colaboradores que no soportan a la presentadora, lo sabíamos.
Una Paz Padilla al límite, explotaba diciendo que no tenía por qué aguantar sandeces, se arrancaba la petaca y al grito de "¡Se acabó! ¡Me voy!” abandonaba el plató diciéndole al director fuera de sí: “¡Está siempre igual. Se acabó. Me voy, te lo juro!” “¡No soy amiga ni compañera, soy la presentadora y tengo que preguntar! ¡Soy la presentadora!”.
Kiko Hernández tomaba el mando por unos minutos ya que tras la publicidad una Paz Padilla más calmada volvía a ocupar su puesto aunque la tensión era más que evidente. Se ha abierto una fisura importante en un “Sálvame” desgastado y a la deriva.
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