Como la vida misma, ni todo es blanco ni todo es negro. Algo de lo que se ha venido dando cuenta la periodista María Patiño, muy especialmente de un tiempo a esta parte cuando algunas de las mejores noticias recibidas nunca se han entremezclado con las peores experiencias que el ser humano tiene que atravesar en la vida.

Y es que la colaboradora de Sálvame viene de atravesar unos meses en los que ha tenido que enterrar a familiares muy cercanos mientras, en paralelo, veía cómo despegaba a nivel profesional en dirección a cotas nunca sospechadas que la colocaban como uno de los grandes puntales de la cadena para la que trabaja.

Todas estas experiencias la han llevado a ser una persona mucho más introspectiva, analista, profunda y a tratar que ninguna de las cosas que pasan a su alrededor o le conmueven, pasen sin dejar poso de una existencia que, como la de todos nosotros, es finita y repleta de sobresaltos mientras dura.

En una de esas paradas reflexivas en las que María Patiño se bajaba del mundo para ver qué es lo que le hace feliz y qué lo que le hace infeliz, la gallega acababa descubriendo la que es, para ella, la fórmula infinita de la felicidad. Una vez revelada, la comunicadora no tardaba en ponerla en conocimiento de sus muchísimos seguidores a través de una publicación que hacía extensible a sus cuentas oficiales en las redes sociales.

Lo hacía subiendo una foto de un primerísimo primer plano de su rostro esbozando una sonrisa y con una inscripción en la que dejaba claro que ella ya había encontrado la ansiada felicidad gracias a sus reflexiones. Esta rezaba lo siguiente: "¡Ay! ¿Sabéis lo que es la felicidad? Estar y ser lo que quieres".

El complicado año de María Patiño del que solo saca conclusiones positivas

Una frase simple pero que esconde mucho paso tras de sí y que pronto empezaba a generar reacciones de todo tipo multiplicándose los comentarios por decenas y sumando miles de "me gusta" con comentarios de todo tipo, destacando todos aquellos que se alegran de que, tras un año tan peculiar, esta haya podido no solo salir adelante, si no que se haya dado cuenta de cómo ser feliz y logre ese ansiado estado de bienestar que es, a la fin, la felicidad.

A la espera de que la periodista siga sorprendiéndonos en las redes sociales o en sus programas en su faceta como filósofa, les encomendamos a que repasen su perfil en las plataformas sociales donde María se muestra diariamente en estado puro.