A pesar de lo que pudiera parecer en muchas ocasiones, es decir, que no le importa nada que sus colaboradores mantengan enfrentamientos dialécticos de primer orden e incluso que los alienta, lo cierto es que cuando estos se desmadran las preocupaciones se desatan en la zona noble de la cadena de Fuencarral.

Y es que en Mediaset España está todavía muy reciente la conversación que Kiko Matamoros mantuvo con algunos pesos pesados de Telecinco para explicarles que después de mucho tiempo aguantando lo inaguantable y poniendo varios nombres de compañeros encima de la mesa, decidía abandonar su sillón y su paga para descansar tras el lío de tantos años.

Lo que venían firmando Mila y Matamoros desde la vuelta de las vacaciones parecen haberlo retomado y de qué manera. Ahora son Paz Padilla y Belén Esteban, quienes con motivo de la boda o la no boda, mantienen un careo delante y detrás de las cámaras que habría provocado que estas fueran llamadas al orden.

La última gran bronca, después de un programa en el que Belén no dudó en menospreciar a la conductora en directo indicándole que sería la única de las que todavía trabajaba en "Sálvame" que no iría al enlace, tuvo lugar ayer. En este caso y después de volver a salir el tema de las invitaciones y de la futura boda, la Princesa del pueblo no dudó en sacarle los colores a la andaluza recordándole que cuando ella se casó, que cayó en sábado, fue invitada el miércoles.

Es decir, cuando ya no tenía posibilidad alguna de acabar asistiendo a un casamiento en el que sí estuvieron otros compañeros de la de San Blas. Algo que ella ha guardado silenciosamente durante algún tiempo y que le espetaba en directo a la gaditana sacándole los colores y provocando un momento de lo más tenso en el plató.

Problemas de audiencia para "Sálvame"

Sea como fuere y mientras estos dos mujeres con carácter para dar y tomar siguen dándose cera, el programa ni siquiera echando mano de este "salseo" de dudoso gusto remonta y sigue su particular caída en picado en términos de audiencia, lo que tiene más que nervioso a alguno de los directivos con despacho en la zona noble de Mediaset España.

A pesar de lo que se podía esperar con el retorno de Jorge Javier y el fichaje de Carmen Borrego, los datos no están siendo los esperados siendo, poco a poco, décima a décima, peores a cada emisión. Algo que algunos achacan a la pérdida de apoyos de Belén Esteban en antena y otros a la marcha de Matamoros. El tiempo pasa para todos.