La presentadora ha recibido una visita de su amigo Jesús Mariñas, muy íntimo de ella y en ella no ha tenido el más mínimo problema en reproducir las palabras que ha intercambiado con la periodista.
María Teresa Campos sigue evolucionando favorablemente aunque continúa ingresada en Madrid, en la Fundación Jiménez Díaz, se está recuperando y saldrá adelante, esto es todo un hecho, ha recuperado la visión perdida de su ojo derecho que por el momento lleva cubierto con un parche, no recibe demasiadas visitas y los médicos y demás profesionales de la fundación se han estado quejando de que hayan convertido aquello en una especie de polémica corazonera y que las hijas de Teresa, Terelu y Carmen no paren de hacer declaraciones.
Entre las cámaras la Campos sigue siendo foco de la polémica y le encanta la prensa por lo que vemos, también de sus más allegados, no sólo de personas anónimas, a pesar de todo se ha preguntado si su paso por el hospital estaba despertando un interés mediático, entre los que han ido a verla, Jesús Mariñas, colaborador por las mañanas ha publicado dentro de La Razón, en su columna las que han sido las primeras palabras de su compañera: "Veía mal con el ojo derecho, por eso se lo tenían tapado, pensó que era por una legaña, se tumbó y se incorporó al poco sintiendo que se tambaleaba, entonces llamó a Gustavo, su chófer, y le llevó a su clínica de siempre en donde notaron que se trataba de algo gordo y que necesitaba una mayor asistencia y que seguía esperando, desde que se dio cuenta de lo que tenía sintió miedo ya que no se le va de la cabeza que Miguel Boyer murió de eso".
Acerca de todo lo sucedido sobre si avisar o no a Bigote Arrocet (su actual pareja) dijo sin titubear que lo decidiría según se fuera encontrando y que no quiere asustarlo sin necesidad ni que se retire de un concurso en el que le está yendo bien y que le hacía tanta ilusión, a pesar de que se opuso a que se fuera a Honduras entendió que era su vida y que quería comprobar si se sentía como hace más de diez años en donde participó en algo similar, dependiendo de como siga evolucionando decidirá si informar o no a su pareja.
Es normal que María Teresa no se encuentre bien y que sienta miedo en esta situación imprevista, es humana, desde aquí nuestros mejores deseos para que se recupere pronto.
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