Belén ha vuelto a convertirse en el centro de la actualidad mediática tras la polémica suscitada por la aparición del tercer volumen de su biografía no autorizada por parte de Julián Fernández Cruz en la que todo el universo Esteban se pone patas arriba después de que gran parte del libro se dedique a poner en tela de juicio su manera de obrar como mujer del torero Jesulín de Ubrique.

En primer lugar, en este escrito se pone en duda su fidelidad, tras revelarse que esta, supuestamente, habría tenido tenido un 'affaire' con un futbolista David Camacho, quien asegura además haber sido pareja de la de San Blas durante un tiempo, algo que "todo el mundo sabía", al menos en ambos círculos.

En segundo lugar, y aquí viene la parte escabrosa, se duda de la paternidad de su hija Andreíta, de quien se dice podría no ser del diestro, con todos los focos apuntando al viejo amor de juventud de la Princesa del Pueblo, en unas acusaciones que han dolido especialmente al entorno de la colaboradora estrella de Telecinco.

No obstante, a este dolor, la puntilla habría llegado de la mano del otro gran afectado en esta historia, el que fuera diestro Jesús Janeiro, quien a pesar de dar el primer apellido a su hija, habría decidido no salir a defender su paternidad ni la palabra de la madre de su hija, optando por rehusar hacer declaraciones y colgando llamadas que simplemente se realizan con el objetivo de saber su impresión 'off the record' como les sucedió a nuestros compañeros de EsDiario.

Un 'mutis por el foro' que ha sido interpretado por varios periodistas como la antesala de la revelación de que quizás haya dudas en este asunto por parte de Jesulín, y por otros como su nulo interés en dar pábulo a todas estas informaciones y, también, como la declaración oficial de su desinterés en unirse a la defensa de Belén como madre, con quien su relación es, desde hace ya muchos años, más que muy mejorable Como ven, Belén Esteban se ha quedado sola defendiendo su historia y la de su hija. Jesulín no abrirá la boca.