Empezamos el repaso por la ganadora de GH 17, Beatriz. La valenciana, que no deja de hacer bolos con los que engrosar sus cuentas ya de por sí acaudaladas tras ingresar el premio de ganadora del concurso ha dejado Valencia y ha decidido irse a vivir a Madrid... ¡pero no con Rodri!. Creen que es pronto para tomar ese paso y, después de haber ayudado a su madre económicamente, le toca vivir su vida.
El novio de Bea, Rodrigo, que sigue enamorándose cada día más de su chica, ha decidido abandonar el nido materno e irse a vivir a un piso compartido con varios amiguetes, entre los que se encuentra algún ex de Gran Hermano.
Algunos dicen que la cosa tiene peligro, él asegura tener las cosas muy, pero que muy claras.Clara, la mejor amiga de Bea, no deja a la vigente ganadora de GH 17 ni un segundo. Tanto es así que en las últimas horas conocíamos que esta le habría ofrecido su apartamento a Naranjita, siendo la respuesta de la valenciana "por supuesto".
Una amistad que parece estar más que consolidada.Uno de los participantes más polémicos de la última edición fue Miguel Vilas. El modelo gallego, que pregonó que jamás volvería a usar peluca -la usó- ni a avergonzarse de su imagen -lo ha hecho- acaba de someterse a una nueva operación de estética para mejorar su expresión facial y rejuvenecer. Hay gente que nunca cambia.
Adara, quizás la más querida, a tenor del número de fans que acumula en las redes, está más enamorada que nunca de 'su cuchu', Pol Badía, con quien comentó hace unas semanas no le importaría nada casarse. A diferencia de Bea y Rodri, estos dos sí que tienen prisa y ya se habla de boda ¿y bebé?.
Bárbara, la youtuber veterana de #GH17, sigue a lo suyo dando consejos de belleza en la red.
Además, de vez en cuando aprovecha para no alejarse del circo mediático como hizo hace unas semanas en las que criticó a Mercedes Milá tras interpretar que la ex presentadora había faltado a los miembros del equipo del que ella formó parte.
Otra de las que más juego dio en GH 17 fue Meritxell. La catalana parece haber encontrado el amor en un modelo de fitness fuera de la casa llamado Javi Martínez, a quien conocería de hace tiempo.
La llama del amor, aunque con retardo, habría por fin tocado a Meri como no pudo ser en la casa.
Allí, dentro Alain, nunca acabó de sentirse atraído por ella. El francés, que tiene fobia al compromiso, sigue siendo un auténtico 'picaflor' alejado de Guadalix de la Sierra. Eso se lleva en la sangre.
