Diego Matamoros ha pasado en una semana de un calabozo a un resort de lujo, hace pocos días, pudimos ver de nuevo a Diego en esta ocasión metido en una pelea con la que fue su pareja Tanit Grande y con el amigo especial de ella a día de hoy. Los hechos ocurrieron a las puertas de la vivienda de Tanit, al parecer, venía de un viaje con su nuevo amigo cuando apareció Diego y según testigos, hubo más que palabras.

Tras lo ocurrido, una demanda por parte de ambos que a corto plazo les obliga a respetar una orden de alejamiento. Tanit al testificar en comisaría dijo que la niña no era hija de Diego y que no está reconocida como tal en el juzgado, con todo esto, Diego decidió irse a un resort calificado como uno de los más lujosos de España aprovechando este pasado puente del mes de marzo.

Diego parece haber elegido un lugar donde se respire paz y sosiego después de lo acontecido pocos días atrás. Este chico ya demostró su rebeldía y carácter con su mismo padre y con la mujer de Kiko Matamoros, Makoke, la cual parece que desee tener a Diego lejos.

Si Diego tuvo algo de credibilidad en su momento, la pierde por instantes, su padre ha hablado en Sálvame a favor de el y su hermana Laura Matamoros también esta a su lado pero Diego decidió apartarse unos días del mundano ruido de Madrid e instalarse en un hotel de lujo para descansar y pensar quizás sobre los acontecimientos que ocurrieron y que tanto darán que hablar.

Ha solicitado la prueba de paternidad a Tanit y todo esto traerá un sinfín de entrevistas, publicaciones y exclusivas a la espera de que se realicen dichas pruebas, pronto lograremos saber si Diego es o no el padre de la niña.

Cuando participó en el reality " Supervivientes" nos enseñó una ecografía que mandó Tanit a la isla, ahora nos encontramos con esto y no cabe pensar otra cosa diferente a que esta familia ha hecho de sus vidas un auténtico culebrón empezando por el padre, continuando por los hijos y hasta la mismísima madrasta se apunta un tanto.

Después de la tormenta, nada mejor que un resort exclusivo para luego volver a golpe de talonario y seguir viviendo del cuento, así son ellos, así lo viven y así lo venden, todo vale, nada es un impedimento cuando hay varias cifras en un papel.

¡Feliz día, lectores!