No sabemos si buscan a quien sea debajo de las piedras, o están desesperados con tal de que las delirantes teorías de Donald Trump desde que está en la Casa Blanca sean ciertas, pero después de que uno de los fans del Presidente les saliera diciendo que le gustan las chicas menores de edad, por lo que ya le han retirado la palabra, ahora quieren, como un karma, que la falsa teoría de atentados en Suecia por refugiados es auténtica por que ellos lo dicen.

El diario Le Monde informa, por su corresponsal en Suecia, que el país de Ingmar Bergman, después de oír la calumnia de Trump, ahora descubre a un compatriota que no tenía ni idea de que existiera.

Se llama Nils Bildt y fue invitado el jueves al canal televisivo Fox News, furibundamente conservador, y presentado como “Consejero sueco de Defensa y Seguridad Nacional”.

Querían, gracias a él, corroborar que las acusaciones de Trump contra Suecia en materia de seguridad eran ciertas. “El debate político en Suecia es una total falacia. Si no estáis de acuerdo con la Política de izquierdas [del Gobierno sueco], entonces sois un ‘outsider’ o no se os tomará en serio”, dijo Bildt. Las Redes Sociales de los seguidores de Trump le aplaudieron como a alguien que por fin dice la verdad. O lo que ellos quieren oír, en vez del silencio de Dios del que tanto hablaba Bergman.

Pues bien, en Suecia, ni el Ministerio de Asuntos Exteriores ni el Ejército han oído hablar de este señor.

Es más, en 1994 abandonó el país para vivir en otros lugares, y antes se llamaba Nils Tolling. Se puso Bildt por Carl Bildt, ex Primer Ministro, que ha negado todo parentesco con él. Lleva años en EE.UU., pero lo curioso es que hace años pasó un año en la cárcel, en Virginia, por estar borracho en plena calle y por agredir a un funcionario.

Estaba invitado al programa de Bill O’Reilly, una especie de Hermann Tertsch americano. Defiende el equipo del mismo su invitación: “Nuestro programador ha investigado y habló con gente que nos recomendó a Nils Bildt. Antes, le hicimos una entrevista previa y verificamos su Currículum. Juzgábamos que sería un buen invitado para el programa de esta noche”.

Pero el historial del personaje no parece ser el del Currículum. En 2013, quiso ser diputado de Demócratas de Suecia, partido ultra, presumiendo de su experiencia en temas de Seguridad y de su parentesco con Carl Bildt (entonces fue cuando se cambió el apellido). Al principio, a este partido le seducía el gancho electoral de contar con un pariente del ex Primer Ministro, pero al final se echaron atrás y el hombre se tuvo nuevamente que buscar la vida.

Mientras tanto, la ocurrencia de Trump ha dividido a los suecos. Los ultras nacionales, como todos los ultras europeos, tienen al magnate en un altar, y cada palabra suya va a Misa. Su líder, Mattias Karlsson, se enfrentó en la televisión con Morgan Johansson, Ministro de Inmigración.

“Trump tiene razón, y más en detalles que son falsos”, sentenciaba el primero. El Ministro le replicó: “Estoy orgulloso de nuestro país, pero usted parece avergonzarse. Por cada inmigrante que usted dice que ha cometido un crimen, puedo contar cien que no han hecho nada”.