Si por algo está marcada esta edición de "Gran Hermano Vip" es por la polémica. Muchos de los telespectadores piensan que el programa es mucho más permisivo con algunos concursantes, sobre todo con los que trabajan para la misma cadena; este es caso de Belén Esteban, cuya amonestación por hacer trampas en las nominaciones (no poder nominar) pareció demasiado leve a la mayoría. Tanto es así que las redes sociales están que arden con comentarios de todo tipo sobre la veracidad del reality.
Tal vez por esto Jaime Guerra, productor ejecutivo de "Gran Hermano Vip" ha concedido una entrevista a El Món a Rac1 desvelando algunos detalles del concurso.
En primer lugar, Jaime Guerra indica que el reality no va a prolongarse más de lo acordado, por lo que la final está prevista para finales de marzo. También anuncia que no entrará nadie más en la casa, aunque eso depende de si se produce algún abandono. Por tanto, parece que según estas declaraciones tampoco habrá repesca, algo tan solicitado desde la expulsión de Olvido Hormigos, que audiencia considera injusta.
El productor también ha declarado que la mayoría de los concursantes a los que le propusieron aceptar dijeron que sí, aunque había muchos otros dispuestos a hacer que se han quedado de reserva. Eso sí, no se ha querido mojar y no ha dicho nombres. En cuanto a los sueldos de los concursantes, ha confirmado que cada uno tiene un sueldo semanal en base a su caché, diferente en cada caso, pero ha desmentido que las cifras que han publicado sean reales, en alusión a los 60.000 euros que podría recibir Belén Esteban por semana en la casa.
En cuanto los posibles amaños, Jaime Guerra niega por completo que esto suceda, diciendo que las votaciones son completamente reales y están bajo la supervisión de un notario. Indica que de estar todo programado, los resultados serían otros, pues precisamente la audiencia suele expulsar a los concursantes más polémicos, y por tanto, a los que dan más juego y audiencia, como es el caso del último expulsado, Víctor Sandoval.
Por último, también ha desmentido que se le ordene a los concursantes que actúen de una manera específica, lloren o rían en determinado momento, ya que se comportan como ellos quieren y están en libertad.