¿Te suena esta fruta? Mangostán. Lo cierto es que no es muy habitual encontrarla en cualquier supermercado o tienda de alimentación. Su cáscara oscura esconde en el interior unos gajos blancos, de tamaño similar al de los gajos de nuestras naranjas.

Su árbol, de hoja perenne y oriundo de los climas tropicales como Indonesia o Filipinas, es la Garcinia mangostana, rica en xantonas (antioxidantes), catequinas, fenoles, polisacáridos, estilbenos, minerales y vitaminas. Todo un tesoro nutricional que bien conocen las culturas asiáticas, ya que les ha permitido mantenerse sanos durante generaciones ante la escasez de alimentos.

Sus comprobadas cualidades terapéuticas la han convertido en una milenaria aliada de la medicina oriental .

Indicaciones del mangostán

También llamado mangosto o mangostino, sus xantonas previenen el endurecimiento de las arterias protegiendo al corazón de las miocardiopatías. A su vez, estos compuestos antioxidantes refuerzan las defensas y mitigan la inflamación celular, propia de patologías articulares como la artritis, mediante la inhibición de la enzima CoX2. Su poder antiinflamatorio es igualmente adecuado para mantener alejadas la diabetes tipo II o el cáncer.

¿Sabes que sus catequinas poseen una capacidad superior a la de la vitamina E para combatir el envejecimiento provocado por los radicales libres?

Otros de sus beneficios más destacados se resumen como sigue:

  • Su composición en potasio te ayuda a esquivar la hipertensión.
  • Su aporte de fibra reduce los níveles en sangre del colesterol malo (LDL) y evita la acumulacíon de las adiposidades de grasa.
  • Es diurético, por lo que además de favorecer la remodelación del volumen si retienes líquidos, es una fruta adecuada para eliminar toxinas en caso de artrosis, cálculos renales o gota.
  • Utilízalo si padeces acné, ya que como depurativo, limpia la sangre y regula los níveles de sebo.
  • Su vitamina C es idónea para complementar las dietas de adelgazamiento.
  • Es fungicida, antiviral y antibacteriano, eficaz para acabar con bacterias como la salmonela o el estafilococo.
  • Es analgésico.
  • Ataja la fatiga al estimular el sistema nervioso central actuando como revitalizante.De hecho, se la considera la fruta anti Alzheimer y anti Parkinson y el mayor antidepresivo natural que podamos encontrar.
  • Su vitamina B12 disipa las dolencias hepáticas.
  • Su privilegiada composición evita el acúmulo de bacterias en el estómago, responsables de las diarreas, la distensión abdominal o la flatulencia.
  • Previene las infecciones urinarias derivadas de la pérdida de tono muscular en pelvis y próstata como consecuencia del envejecimiento.
  • Si te lo aplicas en crema, su capacidad cicatrizante te permitirá revertir patologías cutáneas como la psoriasis, los eczemas, la dermatitis o las erupciones.
  • Mejora la sintomatología asociada a afecciones respiratorias como alergias o asma

Todo un derroche de beneficios de sabor dulce que deberíamos importar a nuestra dieta. Los beneficios son abrumadores. ¿No crees?