Entre la orina, la sudoración y la localización cercana al ano, es muy obvio que nuestra vagina precisa atenciones y varios cuidados con regularidad, y por supuesto la visita al ginecólogo al menos una vez por año, cuando la vagina no recibe la atención merecida no se encontrara saludable. Estas son las señales que nos indican que no lo está:

Irritación o resequedad vaginal, es una señal de que tu vagina no se encuentra saludable, principalmente cuando te encuentras cerca de la menopausia, lo que hace que aparezcan estos síntomas, por dentro o por fuera, y resulta muy incomodo, hasta puede ocasionar dolor en el acto sexual.

Olor a pescado, cuando se tiene una vagina que está saludable tendrá su propio aroma, pero si su olor es como de pescado con un flujo sin color, es decir es transparente, podría indicar que hay una infección, si el olor es fuerte y tu flujo es color verde, podría ser culpa de una infección de transmisión sexual (ITS), y la realidad es que no deberías emanar un olor tan predominante.

Comezón o flujo irregular, si el flujo parece como queso cottage, o si es de color blanco o amarillo, podrías pasar por una infección, esto ocurre por un hongo pero puede tratarse con antibióticos, puedes evitarla tomando agua, comiendo yogurt y limpiándote bien; ardor al orinar, podría indicar que pasas por una infección urinaria, generalmente es provocado por el sexo, suele ser común, pero solo se puede tratar con un médico.

Inhabilidad para meter tampones, generalmente cuando hay dolor en el sexo es algo psicológico, pero en algunas ocasiones es por causa de un hien imperforable, y puede tratarse con cirugía y solo puede diagnosticarse por los ginecólogos. Sangrado irregular, si cuando no estás menstruando pero sangras o tienes manchas de sangre, es causa de un desequilibrio de las hormonas, que se ocasiona por estrés, cambios de peso drásticos o por anticonceptivos, pero si sangras luego de tener relaciones sexuales puede que tengas cáncer cervical, y esto si puede ser grave.

Infecciones vaginales que sean constantes, si pareciera como que tu vagina se enojo contigo, y vas de una infección a otra, quizás necesites un descanso, porque a veces te está indicando de que no eres feliz, ya sea en una relación o quizás contigo misma, así que pon una pausa, piensa bien, relájate, reflexiona y aliméntate bien.