Mientras la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, celebraba el día de Andalucía, la Cámara de Cuentas entregaba un informe alarmante que refleja un agujero financiero de más de 3.385 millones de euros de dinero público gastado sin justificación alguna.
Este agujero data de 1987, según el informe de la Cámara de Cuentas del que se hace eco el medio local Digital Sevilla, y desde 2012 ha sufrido un aumento de más de 1.000 millones de euros donde destaca el aumento de los pagos sin justificar. En concreto, el dinero público gastado sin justificarse debidamente ha aumentado en los ejercicios de 2014 y 2015 casi un 25%.
Ya en 2012 eran más de 2471 millones los que se había gastado el gobierno municipal sin aportar su debida justificación, lo que implica un aumento del 36% en los últimos tres ejercicios.
El dinero público gastado se utiliza para el pago de subvenciones, nóminas, expropiaciones, gastos corrientes o adquisiciones patrimoniales y la falta de justificación no implica directamente que exista corrupción pero si una falta de transparencia impropia de un gobierno que asegura ser de izquierdas.
La administración paralela de Susana Díaz
La Cámara de Cuentas habla en su informe de la gran cantidad de agencias con las que cuenta el gobierno andaluz. La mayoría del dinero no justificado acaba en forma de subvenciones en estas entidades que a menudo son utilizadas como "agencias de colocación" para miembros del PSOE andaluz.
Otro de los factores que han provocado este agujero financiero es la exoneración de pago decretada por Manuel Chaves en 2007 a las subvenciones por la formación o la gran cantidad de dinero que debe el servicio andaluz de empleo, que en 2012 ascendía a 882 millones de euros sin justificar.
La Cámara de Cuentas finaliza su informe pidiendo al gobierno autonómico que agilice los trámites para revisar las justificaciones y evite así que prescriban y queden libres de cualquier reclamación pero parece que el gobierno andaluz no tienen ninguna prisa y sus socios de gobierno, Ciudadanos, no le plantean ningún tipo de presión al respecto.
