La segunda planta del centro comercial de los Prados, de más de 500 metros cuadrados es el lugar donde se puede disfrutar de la exposición "Terracotta Warriors. The army of the first emperor of China", que organiza el periódico asturiano La Nueva España, desde el 15 de diciembre al 28 de febrero de 2018.

La muestra trata de llevar al visitante, en un viaje a través del tiempo, al pasado de la legendaria China. Por medio de la reconstrucción del foso, del uso de la luz y del sonido, se busca recrear la sensación cuasi mística que produce visitar el yacimiento arqueológico más grande del mundo, tiene unos 20.000 metros cuadrados.

Se recurre a la reproducción homologada y a tamaño real de 100 figuras de los guerreros de terracota del yacimiento, que está fechado en el 211 antes de Cristo.

Se busca reproducir la experiencia de visitar el yacimiento original

Aunque los guerreros que se exponen son réplicas, los originales a duras penas salen alguna vez de China, se busca conseguir la sensación real que causa la visita al ejército de guerreros de terracota, uno de los hallazgos arqueológicos más importantes del s.

XX

La visita a la Exposición comienza con un documental que explica los antecedentes y la historia de este gran conjunto, considerado Patrimonio de la Humanidad desde el año 1987 por la Unesco. Una cordillera de pirámides escalonadas sirve de mausoleo a los primeros emperadores de China en la región de Xián. El primer guerrero de arcilla fue descubierto a 4 metros de profundidad, el 29 de marzo de 1974 por unos campesinos que buscaban agua para salvar su cosecha amenazada por una pertinaz sequía y cavaron un pozo cerca de Xi'an, China.

Todos los guerreros son diferentes entre sí

Sorprendidos al descubrir una cabeza, los campesinos continuaron excavando hasta dar con unas cien figuras. Tras eso los arqueólogos descubrieron unos 8000 de soldados y también caballos esculpidos enterrados junto al autoproclamado primer emperador de China, Ying Zheng, más tarde conocido como Qin Shi Huang Di (259-210 a.C.

el Emperador amarillo), un caudillo que derrotó a los demás y dio nombre a China, a la que dotó de un sistema de medidas y una escritura estandarizada, pero que también fue cruel y tirano.

Los descubrimientos fueron escalonados, en 1976, se descubrió la segunda fosa, situada a unos 20 metros al norte de la primera, contenía unas 1400 figuras entre caballos y jinetes. Posteriormente se localizó la tercera fosa que contenía 68 oficiales. Aunque aún no se han desenterrado todas las figuras y tampoco se ha abierto el mausoleo de Qin Shi Huang Di, formado por una bóveda en una colina artificial.

El emperador que estaba obsesionado con mantener el poder, que tanto le había costado conseguir, también en el más allá, creía, según la teoría más extendida, que con estas figuras seguiría teniendo tropas a su mando.

Por eso están enterradas muy cerca de su tumba y dispuestas en formación de batalla, en filas uniformes. Realizadas a tamaño natural cada una supera los 180 cm. y tiene una complexión fuerte, además, van ataviadas con armaduras y armas (arcos, lanzas, espadas…). Se pretendía no dejar espacios vulnerables, por eso las tres primeras filas estaban compuestas por 200 guerreros armados con arcos y flechas. En la retaguardia los soldados miran hacia atrás, protegiendo al cuerpo principal.

Todas las figuras son diferentes, varían sus rasgos, edad, etnias, peinados, bigote…la cabeza y las manos se realizaban por separado y luego se añadían al cuerpo. En principio estaban realizadas a todo color, pero este desaparece con la oxidación a las pocas horas de desenterrarlas.

Más de 700.000 hombres trabajaron durante toda su vida, en la construcción de este fantástico ejército, para lo que se utilizaban grandes hornos de cerámica.

Muchas de las piezas fueron destruidas, suponiendo para la arqueóloga XuWeihong y su equipo que trabajan en el yacimiento una labor titánica su reconstrucción. También hallaron un sistema de drenaje que impedía que el agua inundara la tumba. Toda esta labor fue recompensada en el año 2010 con el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales.

Horarios y precios

Los horarios para visitar la exposición "Terracotta Warriors.

The army of the first emperor of China" serán de martes a vienes de 17:00 a 21:00 y los sábados, domingos y festivos de 11:00 a 14:00 por la mañana y de 16:00 a 21:00 por la tarde. 8 euros es el precio de la entrada para los adultos y 6 para los niños. Además, se organizará un programa de talleres y de visitas guiadas para completar la experiencia.

Esta exposición, que ahora recala en Oviedo, ha recorrido ya varias ciudades europeas, en España han podido disfrutarla ya en Madrid, Bilbao, Sevilla y Vigo.

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