Todos saben que en Francia se respeta y venera a sus artistas y literatos que hayan aportado algo grande al país y a la Humanidad. La Historia recuerda, por ejemplo, el multitudinario entierro del escritor Victor Hugo en 1885, al ser llevado al Panteón de Hombres Ilustres de Francia, reservado a unos pocos privilegiados, como otro gran escritor: Molière.

Estos días, el Destino ha hecho que fallecieran, con pocas horas de diferencia, el escritor y filósofo Jean D’Ormesson y el cantante Johnny Hallyday. Para el segundo, la gente pedía un Homenaje Nacional, algo sólo reservado para personalidades determinadas, por lo que recibirá un Homenaje Popular, que será multitudinario, ya que su cortejo fúnebre irá por Champs Elysées desde L’Arc de Triomphe, pasando por la Place de la Concordie, hasta la Iglesia de la Madeleine, para el cual estará segura la presencia de miles de personas rodeando la calle para darle el último adiós.

Homenaje Nacional sencillo a Jean D'Ormesson

Aunque menos espectacular, el Homenaje Nacional a Jean D’Ormesson es igual de emotivo, pero cargado de sencillez, como era el escritor en vida. Después de dos días, su cuerpo recibe ese homenaje en L’Hôtel Des Invalides, cuyo féretro está cubierto con la bandera francesa. El Presidente Emmanuel Macron ha hecho realidad un deseo de D’Ormesson: depositar una pluma estilográfica encima de su ataúd. Estaban presente la viuda e hijos del autor, que se lo agradecieron.

Macron, en su discurso, ha dicho del escritor: “El valor de lo absoluto tras la elegancia de una sonrisa”, recordando la imagen siempre sonriente y sencilla de D’Ormesson. “Consagró su vida a aquello más bello y duradero que tiene Francia, la Literatura.

Su claridad es lo que primero nos faltará”. Fue Presidente de la Academia Francesa durante años, y Marguerite Yourcenar fue la primera mujer en entrar, gracias a él. Escribió muchos Libros de varios géneros, entre ellos Filosofía y Ensayo, muy influyentes entre sus compatriotas.

D’Ormesson no era apenas conocido en nuestro país, pero los cinéfilos recordamos su faceta de actor de Cine.

Precisamente le vimos como un ficticio Presidente francés en “La cocinera del Presidente”, con argumento inspirado en las vivencias de un cocinero que estuvo en el Elíseo durante el mandato de François Mitterrand. D’Ormesson rompía con la imagen solemne de los Jefes de Estado de su país, con su aire de anciano entrañable. Sus conversaciones con la protagonista, encarnada por Catherine Frot, era sobre la comida que tenía que servir, que era muy sencilla, muy lejos de los platos sofisticados de la alta cocina.

El ataúd de Johnny Hallyday recorrerá Champs Elysées

Mientras, Hallyday, como hemos dicho al principio, tendrá un homenaje popular, el cual ha sido preparado por la viuda e hijos del cantante, en contacto permanente con la Primera Dama, Brigitte Macron, ya que ella y su marido fueron quienes recibieron la triste noticia de parte de la viuda antes de que ella lo hiciera público, y fue a visitar la casa de él. Laura Smet y David Hallyday, los hijos, han ido al Elíseo a preparar dicho homenaje, que será mañana sábado. Después, el ataúd con el cuerpo del cantante viajará a la isla de Saint-Barthélemy, en las Antillas Francesas, en el Mar Caribe, donde será enterrado según su deseo.

Por cierto, ya que el otro día recordábamos que Hallyday también fue actor, olvidamos decir que su última aparición en Cine fue haciendo de sí mismo en “Rock’n’Roll” de Guillaume Canet, donde el actor y cineasta, junto con su pareja, Marion Cotillard, también se autoparodiaban en una delirante comedia. Hallyday era a quien acudía el protagonista para que le diera clases sobre la vida. El cantante se autoparodia de manera vitriólica, casi como hizo Raphael en “Mi gran noche”.