adam west, nacido en Seattle en 1928, ha fallecido este viernes 9 de junio. Fue catapultado a la fama gracias a Batman, la serie de los años 60, en la cual interpretó al icónico superhéroe enmascarado durante 120 episodios. En España recibimos su imagen con la voz de Constantino Romero. Posteriormente, también realizó doblajes en los que volvería a prestar su voz, y apariencia, en películas animadas. Nunca llegó a retirarse del trabajo de doblador de cine y series como Padre de Familia, en la cual dejará un vacío significativo.

El fallecimiento de West tuvo lugar mientras estaba rodeado de su familia.

Entre ellos su esposa, Marcelle, sus seis hijos, cinco nietos y dos bisnietos han dado a conocer su pérdida. En el Twitter oficial del actor, anunciaron lo siguiente: "Nuestro amado Adam West falleció ayer por la noche. Era el más grande. Nosotros le extrañaremos muchísimo, con locura. Sabemos que vosotros también le echaréis de menos. Firmado: familia West".

A causa de una Leucemia, West nos ha abandonado, pero su imagen como Batman perdurará. Siempre tuvo la espina clavada de no haber interpretado al personaje en cines, como dejaba entrever en su biografía publicada hace más de veinte años. La cultura pop generada en los años sesenta llevó a la serie a ser una superproducción de la época, y una de las pioneras en cuanto a generar una franquicia audiovisual de superhéroes.

Bien es cierto que la serie será recordada por su aspecto caricaturesco y desenfadado, muy alejado de la estética y personalidad del actual Batman. Quizás, su legado ha repercutido más en la línea de las actuales franquicias de Marvel, las cuales están siendo responsables de un nuevo resurgir del género en el plano audiovisual.

En ese sentido, Adam West ha influido al género en sí para la posteridad. En el cincuenta aniversario de la archiconocida serie, realizó un cameo para el actual éxito televisivo Big Bang Theory, coincidiendo con su capítulo 200.

Sus incursiones en el cine dejaron papeles en películas como La ciudad frente a mí (1959), Robinson Crusoe en Marte (1964), o su voz en la cinta de animación nominada al Oscar de mejor cortometraje, Redux Riding Hood (1997).

Si bien ninguno de sus papeles posteriores a los años sesenta le devolvió la fama a nivel internacional de antaño, el mundo del espectáculo ha querido recordarle en estas fechas, y seguirán haciéndolo en fechas venideras. El actor goza de su estrella en el paseo de la fama de Hollywood.