Para el Festival de Cine de Málaga ya son 20 ediciones desde que comenzó celebrando nuestro cine. Han pasado muchos largometrajes, documentales, cortometrajes... por la visión de un festival que ya es un referente para la cultura española. Este año, por primera vez, han participado ocho películas latinoamericanas dentro de la misma sección que las españolas.

Uno de los títulos más aclamados: Verano 1993, película española ganadora del premio Biznaga de Oro. Dirigida por Carla Simón, nos adentra en su historia autobiográfica, desde su vivencia infantil en el verano del 93.

Su madre murió y su padre había muerto tres años antes. Desgarradora y realista, trata de mostrar un recorrido por la experiencia de una niña con la pérdida, asimismo el cambio de dirección que tuvo que adoptar con una nueva familia. La película también ha conseguido ganar el premio a mejor ópera prima en el Festival de Berlín.

Últimos días en La Habana, dirigida por Fernando Pérez, se ha hecho con la Biznaga de Oro a Mejor Película Iberoamericana. La historia nos adentra en la cotidianidad de La Habana, desde la vida de una persona homosexual enferma de sida. La producción hispanocubana ha gozado de una gran ovación, ya que Gabriela Ramos se ha llevado la Biznada de Plata a Mejor Actriz de Reparto y el largometraje el Premio del Público.

Sin olvidarnos de la heterogeneidad del festival, la sección Zonazine es una parcela muy rica en creaciones artísticas sublimes. La Biznaga de Plata a la Mejor Película ha sido abrazada por Júlia ist, de Elena Martín, la cual también ha recibido la Biznaga de Plata a la mejor dirección. Una trama con la que tantas personas podemos sentirnos identificadas.

Un acercamiento a aquello que escribía el cubano Freddy Artiles: "Una cosa es la idea de la cosa, y otra cosa es la cosa en sí". La cinta de Martín cuenta la experiencia de una estudiante de Erasmus que se enfrenta a la cruda y gélida realidad de vivir en un país desconocido. Dentro de la sección Zonezine también, Blue Rai (de Pedro B.

abreu) ha sido aclamada por el público, recibiendo la Biznaga de Plata.

Un detalle que me emociona, como humana, redactora, amante del arte, humanista... es la Biznaga de Plata a Mejor Documental. La balada del Oppenheimer Park, de Juan Manuel Sepúlveda, ha sido mencionada en la página del festival "por la honestidad con que esta película generó un espacio para que una comunidad pueda expresarse con libertad sobre sus complejos días, desde lo más íntimo a lo más brutal". Se trata de un viaje por el día a día de unos nativos exiliados de las reservas canadienses, los cuales se reúnen a beber todos los días en un parque, a la par que muestran sus opresiones históricas y sus acciones para sobrevivir.

Una sección muy interesante y poco nombrada es Afirmando los derechos de la mujer. Iniciativa que pretende dar visibilidad al papel de la mujer dentro de la sociedad, la cultura y, en concreto, del cine. Además de abogar por un mundo igualitario a través de la creación audiovisual. Las jornadas cineastas han terminado con una gala de clausura, diciendo adiós al Festival de Cine de Málaga, hasta el próximo encuentro, hasta las próximas historias que contar.