El pasado mes de octubre los asistentes a la Feria de Tecnologías Inteligentes de Fabricación han podido disfrutar de algo que no se ve todos los días: la fabricación y montaje de un coche totalmente operativo en apenas 46 horas, la tecnología utilizada para lograr esta hazaña es mediante técnicas de la impresión en 3D, el coche tiene como nombre Strati y la responsable de este "milagro" es la empresa Local Motors, radicada en Arizona, Estados Unidos.
Strati no es el primer coche construido utilizando esta tecnología pero sí el que se ha realizado en tiempo récord, aunque la misma empresa afirma que puede reducir sensiblemente el tiempo de fabricación, han sido 44 horas de impresión y dos más para el montaje final.
Existen sólo dos impresoras de 3D especiales en Estados Unidos, las mismas pueden crear las formas del vehículo utilizando un material sintético reforzado luego con fibra de carbono, el Strati reduce drásticamente la cantidad de componentes ya que sólo 4 piezas lo separan de las 20 mil que se utilizan en un auto convencional, el motor ultimado por el Strati es muy similar que la firma francesa Renault utiliza en su vehículo eléctrico Twisy, incluyendo cuadro de instrumentos, volante y mandos y atención: no se trata de una maqueta sino de un vehículo que ha rodado, con lo que se deja así constancia que funciona de verdad.
El escaso tiempo de fabricación y montaje permite no sólo una reducción de precios sino que además su propietario tiene la posibilidad de personalizar su coche totalmente, con lo que se logra así un automóvil exclusivo y, por si fuese poco, a bajo coste.
Por supuesto que las grandes marcas no han quedado indiferentes ante este suceso y que no es nuevo para ellos este sistema, por ejemplo las firmas GM o Ford llevan un tiempo utilizando esta tecnología en 3D en la construcción de prototipos y en sus centros de diseño, algo que les ha permitido reducir el tiempo de fabricación tanto de sus motores como de varias partes de los coches, en algunos casos de semanas a sólo días, eso repercute directamente en el coste final, algo vital para mantenerse dentro de un mercado tremendamente competitivo.
Pero el Strati no es el primer coche fabricado bajo esta tecnología 3D, su antecesor se le conoce como Urbee 2 y sus características son muy diferentes al Strati, su carrocería es de plástico y construida en una sola pieza, con un chasis de acero, un híbrido de 3 ruedas; cuenta asimismo con todas las garantías de seguridad, eficiencia y eficacia de un coche convencional, fabricado por Kor Ecologic y su propietario está convencido que pronto se podría comercializar una vez pase las pruebas técnicas exigidas, lo cierto es que la industria automovilística ingresa en una nueva etapa de fabricación que nos lleva al uso de coches fabricados con la filosofía de contaminar lo mínimo y rendir lo máximo.
Su motor eléctrico lo convertirían de momento en un coche urbano aunque tendría una autonomía de 3 mil 200 kilómetros.
Claro que esta tecnología aplicada no sólo a la medicina o al mundo del automóvil ha llegado para quedarse y está revolucionando el mundo industrial, por lo cual ya no es para nada irracional pensar que en un futuro este avance tecnológico sea utilizado en todas las facetas industriales e incluso de manera masiva, aunque tenga dos facetas: puede resultar tanto positiva por el hecho de reducir la contaminación ambiental, pero también negativa, por la previsible reducción de puestos de trabajo.
