Si por una cosa se ha caracterizado la sociedad chilena en los últimos años tras el asesinato del joven homosexual Daniel Zamudio, es por la completa apertura y aceptación hacia la comunidad LGBT. Su violenta tortura y muerte a manos de un grupo de jóvenes en la capital del país sudamericano, sacó a millares de personas a las calles en el 2012 contra la violencia homofóbica.

La "Ley Zamudio"

La conmoción nacional daría como resultado la promulgación de la "Ley Zamudio" contra la violencia y discriminación tras años de discusión parlamentaria y la férrea oposición de los grupos más conservadores.

El cambio radical de toda la sociedad civil respecto a la homosexualidad logró también el Acuerdo de Unión Civil entre personas del mismo sexo, y hoy el Matrimonio Homosexual es uno de los grandes temas pendientes en el país, al igual que la adopción por parejas homoparentales.

La polémica se ha manifestado una vez más este lunes, en chile, tras la llegada del autobús transfóbico de "La Libertad", perteneciente a la organización española Hazte Oír (CitizenGo). Los chilenos han salido a las calles para plantar cara al hashtag "conmishijosnosemetan" y las organizaciones Padres Objetores de Chile y el Observatorio Legislativo Cristiano.

Al paso del autobús contra la sexodiversidad por afuera del palacio de Gobierno de La Moneda, en la arteria principal de la ciudad, simpatizantes y opositores se han enfrentado violentamente, a lo que ha tenido que intervenir la policía nacional para dispersar a los manifestantes.

Siete personas han sido detenidas por Carabineros de Chile.

El autobús ha recorrido la capital de Chile

El autobús se ha desplazado por las calles de la capital con el mensaje "Nicolás tiene derecho a un papá y una mamá". El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (MOVILH) sacó a su vez otro autobús con el mensaje "Nicolás tiene dos Papás", en alusión a un cuento infantil.

Rolando Jiménez, personero de la institución declaró que "este bus violenta a padres que quieren igualdad para sus hijos".

Por su parte, el actual candidato a diputado, Luis Larraín, fundador y expresidente de la Fundación Iguales por la diversidad, aseguró: "El bus de libertad no tiene nada. Lo único que queremos es que los niños "trans" puedan tener el derecho a su identidad y que los hijos de padres del mismo sexo tengan un vínculo legal con ambos porque, si no, sus derechos no están protegidos", concluyó.

El bus contra la diversidad sexual ya ha recorrido Madrid, México y Colombia. Este lunes, diversas instituciones como la Central Unitaria de Trabajadores, la Universidad de Chile o el Centro Cultural Gabriela Mistral, han colocado en sus fachadas la bandera LGBT como señal de repudio al recorrido del polémico autobús.