Llega el calor antes de tiempo por lo que os propongo dos recetas de verano muy fresquitas y sencillas para sobrellevarlo mejor. Dos recetas tradicionales, de toda la vida, pero con un componente diferencial que dejará de piedra a vuestros invitados. La primera receta es un ajo blanco al coco. Una crema que gustará tanto a los amantes de la cocina andaluza, como a aquellos que os guste innovar.

Receta de ajo blanco de coco

Ingredientes:

2 ajos

250 ml leche de coco

150 gr almendras

Aceite

Pan duro

Vinagre

Salmón marinado

Cebollino

Preparación:

Pelamos los ajos y los ponemos en un recipiente junto con las almendras y el pan duro y trituramos con la batidora o con la termomix.

Añadimos la leche de coco y mezclamos hasta que se consiga una textura lisa y sin grumos.

Añadimos la sal, el vinagre y el aceite al gusto. Después dejamos enfriar (podemos meterlo en la nevera añadiendo hielo para suavizar el sabor).

Parte del plato es la presentación, por lo que os propongo usar un recipiente pequeño o un vasito alargado. Añadimos el ajo blanco y adornamos con salmón marinado y dos trozos de cebollino. Otra idea es añadirle unas gotas de aceite de trufa y pimienta negra en la superficie.

La siguiente receta es un salmorejo hecho a base de remolacha. Sorprenderéis desde el primer momento gracias a su color y luego con su sabor suave y mediterráneo.

Receta de Salmorejo de remolacha

Ingredientes:

1 pimiento verde

6 tomates de pera

1 cebolla

1 ajo

1/5 pepino

1 bote de remolacha

Melón

Nata

Aceite

Vinagre

Sal

Bacon

Langostino

Preparación:

Empezamos pelando y picando la verdura (cebolla, pimientos, pepino, ajo y tomates), los tomates recomiendo quitarles la piel para que quede una textura más suave.

Lo pasamos todo con la batidora o termomix hasta que no queden grumos. Añadimos la remolacha y seguimos batiendo. La diferencia entre una buena crema y otra exquisita es muchas veces la textura que tenga, tener paciencia en este paso y lo agradeceréis.

Añadimos sal, vinagre y aceite al gusto. Para suavizar el sabor le ponemos una rodaja de melón y un chorrito de nata líquida de cocinar.

Para servirlo pelamos un langostino y lo pasamos por la sartén a la plancha. Freímos bacon y enrollamos uniendo el langostino y el bacon con un palillo. Añadimos el salmorejo en un recipiente pequeño y ponemos en la superficie el langostino con el bacon.

Y así tenemos dos platos sencillos y exquisitos que servir este verano. Dos cremas mediterráneas con un punto creativo.