El pasado jueves 22 de junio, el Congreso de los Diputados, por consenso entre los grupos políticos del PP, Ciudadanos, PNV y PDeCAT, aprobó 25 enmiendas que se incorporarán a la Ley de Reformas Urgentes del Trabajo Autónomo. Esto fue posible gracias al pacto al que los grupos mencionados llegaron a finales del año pasado. El siguiente paso es enviar el texto con las medidas acordadas al Senado para su aprobación definitiva, de manera que se permita su entrada en vigor cuanto antes, probablemente en el mes de julio y si no tras las vacaciones estivales.

Jose Ignacio Echániz, que es el portavoz de Empleo del PP en el Congreso, se mostraba satisfecho con estas medidas que considera un avance y manifestaba que es importante porque “tiene una implicación directa en la vida de los españoles que trabajan por su cuenta”.

Los trabajadores autónomos en España conforman un colectivo integrado por más de 3,2 millones de personas, cifra más que respetable para darnos cuenta de que no se trata de una cuestión baladí la introducción de mejoras en su situación, pues son uno de los principales sostenes de nuestra economía. Esta ley responde a unas demandas que el colectivo de trabajadores por cuenta propia viene reivindicando desde mucho tiempo atrás.

Cuáles son las principales medidas acordadas:

  • Quizás la más reseñable sea la ampliación de la llamada “tarifa planapara nuevos autónomos de seis meses a un año. Esto quiere decir que la cotización a la Seguridad Social para los nuevos negocios será de 50 euros al mes durante un año. Además, esta ventaja se podrá retomar tras dos años de interrupción de la actividad, antes la espera obligada para disfrutar de esta tarifa era de cinco años.
  • En el campo de las bonificaciones a las cotizaciones, podrán aprovecharse de ellas durante tres ejercicios seguidos, los hombres menores de 30 años y las mujeres menores de 35, eso sí en función de la evolución de su negocio.
  • Varían las altas y las bajas, ahora se permiten tres al año y se pagará tan sólo por el cómputo real de días trabajados.
  • Los trabajadores autónomos también podrán variar cuatro veces por año la base de su cotización a la Seguridad Social (antes eran solo dos). Esta medida busca adaptar los pagos a la evolución real del negocio en cuestión.
  • Además, no se perderá el derecho a percibir las bonificaciones aunque se contrate personal asalariado, es más, si el contrato es indefinido la bonificación de la cotización social asciende al 100%.
  • Las bonificaciones también se aplican a la cotización de la Seguridad Social al contratar a un familiar directo como asalariado de manera indefinida, siempre que para hacerlo no se haya procedido previamente al despido improcedente de otro trabajador.
  • Asimismo se busca favorecer la maternidad, así las mujeres que se reincorporen al trabajo tras haber sido madres pagarán la tarifa plana de 50 euros a la Seguridad Social durante un año.
  • Otras de las medidas aprobadas es la de permitir la compatibilidad entre el cobro del salario y la pensión, para los autónomos que se mantengan en su puesto de trabajo tras pasar la edad de jubilación cuando tengan empleados.
  • En caso de retraso en el pago a la Seguridad Social se reduce el recargo a pagar del 20% al 10%.
  • Se busca incentivar el trabajo del autónomo en el hogar con la posibilidad de deducir un 20% en las facturas de la electricidad, el agua y el teléfono.
  • Además, los autónomos que por cuestiones laborales se vean obligados a comer fuera de casa, podrán optar a una deducción de 12 euros por comida. Para ello tendrán que efectuar el pago por algún medio electrónico para permitir la comprobación del día y del lugar, y realizarse en restaurantes o cafeterías.
  • Por último esta ley busca una mayor participación institucional de los trabajadores autónomos, para ello se pretende integrar a las organizaciones de autónomos en la participación del Consejo Económico Social.