Gareth Bale ha abandonado la concentración de Gales tras las malas sensaciones en la sesión de entrenamiento del pasado lunes y la posterior confirmación de una nueva lesión. El jugador del Real Madrid volvió a sentir molestias por la parte posterior del muslo izquierdo cuando preparaba con su selección los compromisos de clasificación para el Mundial de Rusia 2018. Gales pierde así a su jugador más importante, y afronta un gran desafío en su camino hacia el Mundial.

Fue en la propia selección donde se sometió a las pruebas que confirmaron su recaída con el sóleo de la pierna izquierda.

Antes, la Asociación de Fútbol de Gales se había puesto en contacto con el Real Madrid. Sin embargo, desde el club blanco no se ha emitido ningún comunicado. Lo único que se conoce son las palabras de Zidane. El entrenador ha hablado hasta en dos ocasiones sobre lo que finalmente se ha confirmado como una nueva lesión.

Los síntomas comenzaron en el Signal Iduna Park, durante el segundo partido de Champions. Su sustitución en el minuto 86 y las imágenes del jugador cojeando hicieron saltar las alarmas. Su entrenador intentó tranquilizar asegurando que solo eran “calambres”. Pero, posteriormente, tras caerse de la convocatoria frente al Espanyol en Liga, Zidane volvió a enfrentarse al tema, esta vez limitándose a decir que tenía “una sobrecarga, nada más”.

Muchos días de baja como madridista

Si echamos la vista atrás y repasamos todos los problemas de Bale en esa misma zona, nos encontramos con hasta 23 lesiones. Sin duda un constante problema tanto para el jugador como para sus clubes. Desde que llegó al Bernabéu, ha sumado 250 días de baja. Lesiones que llegan en momentos importantes como el que estaba viviendo ahora el delantero.

Tras su inicio desesperanzador para los aficionados blancos, Bale parecía recuperar la confianza en los últimos encuentros. Sin embargo, esta nueva lesión vuelve a retirarle de los onces del Madrid en los que mucho tendrá que cambiar la historia si quiere hacer historia.

Concretamente han sido diez las lesiones como merengue de Gareth en la región de los sóleos.

Todas ellas le han hecho perderse 66 partidos con la camiseta blanca, una cifra que aumentará como mínimo hasta 72. Getafe, Eibar y Girona, en Liga; Tottenham en Champions; y Fuenlabrada en Copa del Rey, son los rivales contra los que Bale no podrá enfrentarse en las próximas semanas.

Desde el club buscan su salida

La paciencia es limitada. Y la de los responsables del Madrid parece que está llegando a su fin. Las diferentes opiniones que ha generado Gareth Bale con sus lesiones y su rendimiento desde su llegada se están poniendo cada vez más al unísono. Las continuas ideas de su posible venta no han parado de sobrepasar Concha Espina.

Florentino Pérez siempre se ha mostrado defensor del galés, y buscaba en él la alternativa perfecta al relevo de Cristiano Ronaldo.

Los más de 100 millones que se pagaron por él pesan mucho, y parece que el jugador puede terminar siendo una carga para el club. El presidente no estaba dispuesto a dejarlo salir por menos de 150 millones, una cifra desorbitada para un jugador al que le acosan las lesiones.

Ahora, parece que la idea de Florentino ha cambiado. La última lesión parece ser la gota que colma el vaso, y desde el club estarían dispuestos a negociar en torno a los 100 millones de euros. Pero las dudas que planean desde hace tiempo sobre la condición física del jugador, complican mucho el interés de grandes equipos por él. Desde el Real Madrid deberán tener paciencia y esperar a que aparezca un equipo dispuesto a apostar por el delantero, una tarea a día de hoy algo ardua.