La decisión del FC Barcelona de jugar el pasado 1 de octubre a puerta cerrada ante la UD Las Palmas puede salirle cara. El club se enfrenta ahora a una denuncia llevada por La Liga al Comité de Competición de la RFEF y a la Comisión Antiviolencia.

Los motivos de la decisión

La opción de jugar el partido correspondiente a la séptima jornada de Liga fue tomada a pocos minutos de la hora de inicio del encuentro.

Antes, toda la comitiva blaugrana se había planteado no saltar al terreno de juego. Algunos jugadores, como en el caso de Gerard Piqué, defendía dicha opción en protesta a los acontecimientos sucedidos en Cataluña durante la jornada del domingo.

Finalmente, el club pensó en las posibles consecuencias de no jugar, y apostó por la opción de hacerlo sin abrir las puertas del estadio. Perder seis puntos o recibir sanciones más rigurosas era el precio que podía pagar el FC Barcelona por negarse a disputar los 90 minutos. Una vez pasada la circunstancia, habrá que ver cuáles son las secuelas.

Desde la denuncia que La Liga ha hecho llegar a los organismos oficiales, se hace eco de la decisión tomada por el FC Barcelona, señalando que “el club local no permitió el acceso a las gradas a ningún aficionado”.

Este modo de entender los hechos se contraponen a las palabras del presidente del Barcelona. Josep María Bartomeu defendió la responsabilidad del acto y el rechazo demostrado desde el Camp Nou a “la situación excepcional e inadmisible de lo vivido”.

Segundo punto de la denuncia

Pero la denuncia de La Liga no queda ahí. Desde el Campeonato Nacional de Liga de Primera División, también se ha plasmado el incidente ocurrido en el minuto 71 de encuentro.

Fue entonces cuando un espontáneo saltó al césped del Camp Nou y tuvo que ser detenido por la seguridad presente en el estadio. De este punto se conoce que La Liga asegura en el informe que el hombre pertenecía a Omnium Cultural, al igual que sus dos acompañantes presentes también en el campo.

Aseguran también que los tres hombres presentaban autorización del Barcelona para colocar una pancarta en la grada con la palabra “Democracia”.

La invasión de uno de ellos al terreno de juego quedó reflejada en el acta del partido por el árbitro. No obstante, el incidente no afectó al juego, puesto que ocurrió durante la celebración del segundo gol del Barcelona.

El partido más difícil para Piqué

El defensa del FC Barcelona y de la Selección Española atendió a los medios de comunicación tras el partido. Gerard Piqué aseguró que había sido el partido más complicado de su vida, y que en su cabeza siempre estuvo la opción de no jugar. "Me siento orgulloso de la gente de Cataluña", manifestaba el jugador entre lágrimas de emoción que cortaban su discurso.

Respecto a su presencia en la Selección Española, Piqué habló tajantemente: "Si el míster o cualquier persona de la federación cree que molesto, no tengo ningún problema en dar un paso al lado y dejar la Selección antes de 2018". Sin embargo, tras incorporase a la concentración a las órdenes de Julen Lopetegui, el defensa del FC Barcelona ha dado una rueda de prensa en la que ha confirmado su continuidad en la Roja.