Dicen que los genios siempre aparecen cuando se les espera, y en el caso del Real Madrid, su genio está frotando la lámpara justo en el momento más decisivo de la temporada. El conjunto blanco se ha impuesto esta noche 3-0 ante el Atlético de Madrid, su máximo rival de la capital, en semifinales de la UEFA Champions League, gracias al acierto rematador de un Cristiano Ronaldo, que con tres goles pone a su equipo con pie y medio en la final de Cardiff. El primero de sus goles, en la primera parte, un cabezazo imparable para Oblak al borde del área pequeña, dando una fuerza brutal a un balón centrado desde la derecha por Casemiro.

El segundo, ya en la segunda parte, una volea a la escuedra imposible para la estirada del meta atlético, y el tercero una contra llevada perfectamente por Lucas Vázquez, que se la pone atrás para que el artillero portugués fusile la portería de los del Cholo Simeone.

Pero lo de Cristiano Ronaldo desde que es futbolista del club blanco son números para quitarse el sombrero. Se dice pronto, pero el astro portugués ha llegado hoy a la impresionante cifra de 400 goles vistiendo la camiseta madridista, una auténtica barbaridad que no está al alcance de ningún futbolista en activo. Nadie jamás lo ha hecho tan rápido en tan pocos años. El otro dato que deja este primer partido de semifinales es simplemente una brutalidad.

Antes del primer partido de cuartos de final ante el Bayern de Múnich, Cristiano Ronaldo llevaba 2 goles en la presente edición del máximo título europeo a nivel de clubes. Hoy, tres partidos después, "El Bicho" lleva 10 tantos en Champions, a tan sólo uno del máximo goleador hasta el momento, Messi con 11 dianas. Números que hacen temblar a cualquiera, y que aún son superables con un partido más (y seguramente dos) de Champions por disputar, si el Real Madrid certifica el pase a la final de Cardiff el próximo miércoles en el estadio Vicente Calderón.

Una de las claves de este espectacular rendimiento del "7" blanco es precisamente el cambio de mentalidad que ha experimentado respecto a anteriores temporadas. Años atrás quería jugar todo con el objetivo de aumentar e inflar muchísimo sus cifras goleadoras, teniendo como consecuencia que llegar fundido a las fases finales del campeonato, físicamente destrozado y con dolores, como en 2014, cuando pasa los últimos meses de competición jugando con dolores intensos en su rodilla provocados por una tendinitis.

Este año, Cristiano en acuerdo con su entrenador, Zinedine Zidane, han acordado descansar en partidos "poco trascendentes" y el resultado está siendo ver a un Cristiano Ronaldo llegando pletórico de forma a esta fase final, donde todo se decide. Veremos si el astro portugués consigue levantar un nuevo título europeo con el Real Madrid, y si a la vuelta de la esquina le está esperando ya su quinto Balón de Oro.