El rapero Slim Jxmmi se ha ganado un puesto -no oficial- en el libro Guinness de los récords por haberse dado el baño de masas más caro de la historia. Este mismo miércoles durante un concierto en París el artista decidió hacer un crowdsurfing (acción en la que un cantante se lanza sobre el público para que lo sujeten con sus manos y lo vayan moviendo) en el que se le cayó una cadena cuyo valor era de nada más y nada menos que 100.000 dólares.

En un vídeo grabado por un asistente al concierto, se puede ver a Slim y gente de su staff sobre el escenario pidiendo a la gente la devolución de la cadena.

"¿Quién tiene la cadena? Me lo llevo de tour ahora mismo, que traiga la cadena aquí", dijo el rapero en un primer intento de recuperar su joya. En su empeño por recuperar la cadena, el de California incluso se atrevió a ofrecer una recompensa de 50.000 euros. Una cifra casi despreciable si se tiene en cuenta la tasación real de la joya, pero que seguro que más de uno habría firmado al instante.

¿Recuperó la cadena?

Como muchos podían esperar, ni siquiera la recompensa de 50 mil euros fue suficiente para que el descorazonado que cogió la cadena decidiera devolverla a su dueño. Probablemente en aquel momento no le hiciera mucha gracia, pero horas más tarde Slim Jxmmi decidió tomar su cuenta de Twitter para hablar sobre lo sucedido y no parecía muy preocupado, o al menos eso le comentó a uno de sus seguidores en la red social del pájaro azul.

"Sí, hice un crowd surf de cien mil dólares"

"-Honestamente, ¿cómo te sientes sobre ello?

- "Indiferente"

¿Y ahora qué?

Desafortunadamente para el rapero, no le queda más que resignarse y seguir adelante con su vida, puesto que las cámaras de vigilancia del recinto donde se celebraba el concierto no captaron nada y por ello las autoridades parisínas no tienen ninguna pista que seguir.

De todas formas, Jxmmi percibe una buena cantidad de ingresos gracias a su trabajo en la música, donde cada vez es más popular desde que Black Beatles, canción compuesta por su grupo rae sremmurd, se convirtiese en el himno del famoso Mannequin Challenge el pasado año. Y es que, de hecho, la cadena extraviada ya tiene reemplazo, como él mismo mostró en sus redes sociales.

Está más que claro que las celebrities americanas pueden permitirse "despistes" así gracias al respaldo que ofrecen sus cuentas bancarias, pero quizá deberían replantearse la idea de lucir joyas caras en París después de este suceso y del robo que sufrió Kim Kardashian en un hotel de la capital del amor el pasado 2016.