El sistema legal en algunos países puede ser un poco controversial si de lógica hablamos, pero como saben Leyes son leyes y hay que cumplirlas por más extrañas que parezcan, y hoy en día existe una gran cantidad de leyes, tanto exigencias como prohibiciones, que algunas personas considerarían un poco extrañas, que podrían resultar divertidas o hasta insultantes.
Tarifa para Elefantes
Es común que en EEUU se utilicen los conocidos parquímetros, normalmente esto solo aplica a los vehículos, pero en el estado de Florida, también incluyen a los elefantes, por ello si uno es atado a un parquímetro, el costo del parking será el mismo que tendría un automóvil.
La emergencia lo amerita
A veces las necesidades fisiológicas nos agarran en la calle donde posiblemente no sea fácil conseguir un baño público, pero esto no es ningún impedimento en Reino Unido, pues si un hombre siente ganas de orinar en público puede hacerlo, pero solo en la rueda de su vehículo manteniendo su mano apoyada en él. Y en el caso de las embarazadas, pueden orinar donde quieran, es más, hasta puede ser en el casco de un policía.
Fuera dedos en la nariz
Resulta que unas de las leyes de Oriente Próximo, específicamente Israel, consiste en no meterse el dedo en la nariz. Sin embargo, ésta sólo aplica para los días de sábados. Pero ¿por qué los demás días sí el legal este acto? Y ¿sólo es ilegal un dedo?
El país sin chicle
Prohibido mascar chicle en la República de Singapur, de hecho quienes vendan este producto pueden tener hasta una pena de cárcel por dos años y a los consumidores multas excesivamente costosas. Pero ¿qué de malo tiene el chicle? Pues este país asiático no tolera que sus habitantes peguen gomas de mascar en espacios públicos y, como todos seguramente han hecho, pegarla debajo de un asiento es ilegal.
Mientras que en Tailandia, si arrojas un chicle al suelo deberás pagar una multa por un costo de 600$.
Acceso universitario
Hay muchas creencias que dictan el nivel de inteligencia que poseen las personas asiáticas, ya sea por sus múltiples participaciones a nivel mundial en casi todos los ámbitos, por competencias de carácter intelectual y deportivo, sus constantes avances tecnológicos y ambientalistas.
Pues atendiendo a estas creencias resulta que en una de las ciudades más importantes y reconocidas del mundo, Hong Kong, es ilegal inscribirse en una Universidad, a menos que la persona sea inteligente.
