El astrofísico, Simon White, afirma que en un día nublado si se observa el cielo está gris "pero no tiene el mismo tono gris en todas las direcciones; en algunas direcciones es más claro y en otras más oscuro". En este sentido, subraya que se puede confirmar la existencia de una "estructura" en el cielo. Explica que esa "estructura en las nubes" se forma porque "la luz del sol golpea las nubes, se dispersa dentro de ellas y luego nos llega directamente a nosotros porque el aire bajo las nubes es transparente".

White, que hizo esta reflexión en el transcurro de una conferencia en la Fundación BBVA, afirma que al mirar hacia arriba, "vemos la estructura de las nubes".

En esta línea, señala que la estructura que "vemos en microondas es exactamente la misma". Por tanto, el universo actual es "transparente para las microondas". "De modo que podemos mirar muy, muy atrás en el tiempo hasta el punto en que el universo deja de ser transparente y entonces vemos la estructura de esas nubes cósmicas", certifica el investigador.

El profesor apunta que esas nubes son "el punto más lejano, la frontera, el límite del universo visible. Y eso es porque no hay luz. Toda la luz se dispersa y no podemos ver a través de ella. Así que todo lo visible de lo que se pueda sacar una foto está delante de estas nubes".

Límite del universo

El investigador aclara que el universo en su origen "apenas era uniforme y estaba lleno de gas".

En esta línea, señala que se pueden ver "pequeñas variaciones de la densidad y la temperatura de aquel momento. Esas pequeñas variaciones son ondas sonoras que se propagan por las nubes. Son débiles ondas sonoras en lejanas nubes en el extremo más alejado del universo".

White recuerda que cuando más lejos en el tiempo se observa el universo "más atrás en el tiempo vamos".

En este punto, según el profesor, podemos preguntarnos "¿cuán atrás estamos mirando?; ¿cuándo en la historia cósmica existieron estas nubes?". El profesor afirma que esas nubes están "tan, tan lejos que el universo, que ahora tiene 13.000 millones de años, en el momento que observamos solo tenía 400.000 años". Así que era "casi un millón de veces más joven que ahora", indica.

"¿Por qué vemos cosas tan lejanas? Porque desde aquel momento el universo ha sido transparente para las microondas y estas han viajado libremente hacia nosotros. El universo se estaba expandiendo. Al retroceder en el tiempo era más pequeño, más denso y más caliente", aclara el profesor.