¿Por qué soñamos con acontecimientos futuros?, ¿por qué soñamos con sucesos del pasado pero que difieren de lo vivido?, ¿esconden mensajes ocultos los sueños? Estas son varias de las preguntas que el ser humano se hace desde hace miles de años y, aunque la comunidad científica ha avanzado mucho en este tema, continua siendo un gran Misterio.

Si preguntas a un científico o un psiquiatra si se puede viajar a un mundo paralelo a través del sueño, la respuesta será un rotundo no. El pensamiento más común es el de que los sueños solo existe en la mente del soñador, donde se mezclan imágenes junto a sonidos y sensaciones.

Pero antiguas civilizaciones, como la China, creían que a través de los sueños contactabas con el mundo de los muertos. Otras aseguraban que a través de ellos viajábamos a otros mundos diferentes. Personalmente, en más de una ocasión, me he preguntado si a través de los sueños se establece contacto con otros universos paralelos, dando así explicación a los sueños premonitorios o proféticos.

Sabemos que durante la fase REM es cuando se produce los sueños más espectaculares e irreales, se registra una mayor actividad cerebral y nuestro cuerpo se “desconecta” de nuestro cerebro; el tronco cerebral bloquea las neuronas motrices de manera que no nos podemos mover. ¿Podría ser que durante esta fase de desconexión corporal, nuestro cerebro encuentre un “portal dimensional” por el cual, no solo podemos recibir información de otros planos sino que incluso podríamos enviar información de nuestro plano a otros?

De hecho, un viaje astral sería un viaje a un plano paralelo como el anteriormente descrito pero con la salvedad que se haría de forma consciente o lúcida.

Son muchos los expertos que mantienen la teoría de los multiversos y esos supuestos portales de acceso; y que buscan pruebas, con base de la física cuántica y la teoría de cuerdas, de esos tejidos alternativos que de algún modo “vibrarían” a nuestro alrededor.

En ocasiones los sueños son tan reales que costaría diferenciar si es sueño o realidad. Creo que todos o casi todos los que lean este artículo, en alguna ocasión han creído haber vivido lo que en ese momento percibían, pero la realidad es que jamás habían vivido esa realidad o estado en ese lugar. Para este fenómeno o “déjà vu” existen teorías científicas las cuales hablan de que se trata de un pequeño lapsus a la hora de percibir un estímulo externo y por ello da la sensación de que lo que percibimos ya lo hemos vivido.

Pero también existe la teoría de que el “déjà vu” es la información que se nos ha transmitido desde un mundo paralelo.

No soy una persona que recuerde sus sueños, pero los pocos que sí, hace que me haga una pregunta: ¿por qué en mis sueños aparezco en tercera persona? En los que si recuerdo, siempre me veo a mí mismo y nunca lo vivo en primera persona. Quizás sea producto de la casualidad y solo recuerdo los que son en tercera persona, quizás sea de lo más normal o quizás sea la percepción de un mundo paralelo.

Sea como fuere, las teorías, teorías son; aquí reside el gran misterio de los sueños. A día de hoy podemos catalogar los sueños, sus distintas fases, trastornos que se producen durante el sueño y su porqué; pero con respecto a qué son los sueños, solo existen teorías. Quizás dentro de un tiempo tengamos respuesta a ello y aunque podría ser que un sueño solo exista en tu mente, mientras tanto quisiera pensar que el mundo de los sueños no es tan simple.