La apuesta por la conservación de las islas, el respeto al medio ambiente y la apuesta por automóviles renovados no está dando resultado en las Baleares en lo que va de 2018. Toda una serie de interesantes medidas, con grandes ayudas a la implantación del coche eléctrico, están recibiendo resultados negativos, tras un inicio prometedor en las ventas. Todavía queda mucho por delante y época de mayor número de visitantes está por llegar. ¿Cambiarán las tornas en los próximos meses?

La apuesta del gobierno local por el coche eléctrico

Las propuestas y ayudas del gobierno balear están en la línea de la erradicación de todo automóvil contaminante en los próximos años.

Como medidas negativas estaban la prohibición de la llegada de nuevos Coches diésel a partir de 2015 y la prohibición al resto de consumidores de carburantes fósiles en 2035.

Las propuestas en positiva eran las de aumentar los puntos de recarga rápida en las islas, la ayuda económica a ciertos sectores de la población que apostasen por los coches eléctricos y descuentos en los impuestos por vehículos de tracción mecánica, entre otras. El 2020 aparecía como un año importantísimo en la incorporación de estas propuestas y otros puntos de ayuda a la compra.

Uno de los frentes abiertos para la restricción de vehículos era la contaminación, sobre todo en los centros urbanos. Uno de los alicientes para los eléctricos es que las islas tienen recorridos de menos de 100 km, con lo que siempre habrá cerca un punto de carga para el coche.

Actualmente, las Baleares son el territorio español con más puntos de carga por persona, y todavía se planean otros nuevos.

Las cifras baleares están por debajo de la media nacional

El primer trimestre de datos pone a las Baleares muy por debajo de la media nacional en cuanto a la compra de coches eléctricos. Mientras que algunas comunidades cuadriplican las cifras del año pasado (Murcia, Comunidad Valenciana) y otras la duplican (Cantabria, Galicia), en el archipiélago balear solo se han vendido seis coches más.

Abril ha roto la tendencia, pero no es suficiente. Hay que esperar hasta los datos de junio para poder hablar de un cambio real de tornas y observar las ventas de los meses siguientes. Solo así se podrá hablar de un estancamiento, recuperación o tendencia a la baja.

El objetivo es la erradicación de vehículos contaminantes, sobre todo en las ciudades.

La apuesta es el respeto y cuidado al medioambiente. El turismo se convierte en un arma de doble filo que, por un lado, ingresa continuos y pingües beneficios, pero, por otro, puede suponer el desgaste de las riquezas locales.